La temporada que está firmando James Igbekeme en el Zaragoza no solo no está pasando desapercibida para algunos clubs de Primera División y del extranjero que siguen de cerca sus evoluciones también la selección de Nigeria, ya clasificada para la Copa de África, tiene al centrocampista nacido en Lagos en 1995 en su radar para integrar el combinado de las Águilas Verdes en ese torneo que en esta edición se disputa en Egipto entre el 21 de junio y el 19 de julio próximo.

Así, los técnicos de la selección están siguiendo sus evoluciones y en las próximas semanas van a ver en directo a James con el objetivo de que pueda ir convocado por el seleccionador, el alemán Gernot Rohr, para uno de los dos amistosos que el equipo nacional va a disputar como preparación para la Copa de África.

A Nigeria le queda un partido de clasificación en el Grupo E, ante Seychelles el próximo viernes pero está ya matemáticamente clasificada para el torneo desde noviembre, ya que es primera de un grupo en el que están también Sudáfrica y Libia. James Igbekeme tuvo opciones incluso de ir a ese último partido de clasificación pero finalmente su citación, si no surgen contratiempos, será para uno de los encuentros amistosos para preparar el torneo africano.

El centrocampista, un futbolista de explosión tardía, dejó Nigeria con solo 18 años para llegar al Ribeirao portugués, pero en los primeros años en ese país le costó la adaptación al fútbol europeo, sobre todo en el apartado físico. Tras pasar por el Oliveirense, llegó al Gil Vicente, de la Segunda lusa, en el verano del 2017 y un año después lo fichó el Zaragoza con la carta de libertad y con un contrato hasta el 2022 y 10 millones de euros de cláusula. En el Gil Vicente empezó a mostrar su potencial, pero es en el equipo zaragocista donde se ha hecho un sitio más importante en el fútbol europeo que le puede dar la opción de dar el salto a la élite, también y sobre todo a nivel de su salario, en este próximo verano.

POSIBLE TRASPASO

La temporada en el Zaragoza, donde suma 25 partidos de Liga y dos de Copa, siendo fijo tanto para Imanol Idiakez como para Víctor Fernández y en menor medida para Lucas Alcaraz, con el que sí pasó por el banquillo, ha disparado la cotización del centrocampista nigeriano. El Zaragoza, con la situación actual económica que vive y con el único objetivo ya de prolongar un año más su paso por Segunda, apunta a necesitar ingresos en forma de traspasos y James es uno de los jugadores que mejor cartel tienen para ello, junto con otros como Soro o Pombo y, en menor medida, Eguaras.

Así, su continuidad en la próxima temporada no se puede dar por segura, al contrario, y ni el propio jugador se atreve a asegurarla, aunque siempre recalca que se encuentra a gusto en el club. El Zaragoza tiene una posición de fuerza con su cláusula, a la que es en la práctica imposible que cualquier club de los que ahora lo tienen en el punto de mira llegue. «No pienso en el futuro, solo quiero acabar bien la temporada y el futuro ya se verá», dijo el jueves. La llamada con la selección de hecho aumentaría también esa cotización mientras el jugador espera ser clave en esta recta final con el Zaragoza. James arrastra además en las últimas semanas molestias en el pubis, pero está jugando con ese dolor y sabe que goza de la confianza de Víctor.