Los jardineros del Real Zaragoza ya han visitado las instalaciones de Alcalá de la Selva donde el primer equipo realizó la pretemporada el curso pasado y donde pretende volver en este. Los cuidadores del césped de la Ciudad Deportiva tienen que revisar el estado de los campos de la localidad turolense para ponerlos a punto si es necesario de cara al trabajo del conjunto aragonés, que todavía no tiene configurado su proyecto deportivo para el próximo curso, en el que volverá a competir en Segunda.

Lo que sí tiene claro es la apuesta por trabajar en verano en Aragón, lo que haría por segunda temporada consecutiva después de varios estíos en Navaleno. Alcalá de la Selva toma así el testigo de Biescas, Boltaña o Benasque, localidades oscenses que acogieron al Real Zaragoza en el pasado. También están perfiladas las fechas, aunque no son definitivas. Los futbolistas comenzarán la concentración en Alcalá el segundo fin de semana de julio, aunque todavía no se ha concretado si será el sábado 12 o el domingo 13. No obstante, la plantilla se reincorporará al trabajo dos días antes de viajar a la localidad turolense, es decir, el 10 o el 11.

Aunque todavía no se ha producido ningún fichaje ni se ha avanzado en la confección de la plantilla debido a la situación de incertidumbre que rodea al club con la compraventa de las acciones, el grupo de empresarios que actualmente posee la mayoría accionarial de la entidad ha empezado a planificar el trabajo veraniego porque la plantilla deberá volver al trabajo en apenas dos semanas. Por eso, Alcalá de la Selva ha vuelto a ser la elegida por el club y ya trabaja en que todo esté a punto para cuando lleguen los futbolistas.