El tiempo se agota ya para Jorge Pombo, que hoy, en el final del mercado de fichajes, sigue sin haber encontrado una salida lejos de La Romareda en un verano donde la mayoría de las propuestas que ha tenido ha llegado por medio de diálogos entre clubs, aunque su agencia de representación, Bahía, sigue manteniendo que ha presentado una oferta de última hora al Zaragoza para que el jugador salga con la carta de libertad, pero que el club aragonés se guarde opciones de futuro sobre el mediapunta, a través de premios por objetivos o un porcentaje de un futuro traspaso. Sin embargo, la SAD se ha mantenido firme todo el verano en que desea un traspaso por el futbolista y esa es la posición a día de hoy, si bien la necesidad de buscar una salida para un jugador al que se le ha puesto el cartel de transferible, que no cuenta por ello para Víctor Fernández y para Lalo Arantegui, y las apreturas del fin de mercado podrían variar esa situación.

Esa oferta que asegura haber presentado Bahía al Zaragoza tendría que ser de un equipo de Primera, ya que Pombo hasta la fecha se ha negado en redondo a jugar en la categoría de plata, aduciendo que para continuar su carrera allí se quedaba en el equipo aragonés. No es, en todo caso, el Mallorca, que sí ha estado interesado en el mediapunta, aunque nunca como primera opción y siempre con la idea de esperar a obtener la carta de libertad. Además, la posibilidad del Mallorca, que en el entorno del jugador aseguran desconocer, ha llegado en conversaciones entre los clubs, lo mismo que en su día sucedió con la del Granada, ya hace tiempo agotada.

Mientras, el interés más fuerte en Segunda ha sido el del Extremadura, que llegó a ofrecer hasta medio millón de euros, una propuesta que hizo en julio y que se mantuvo vigente hasta casi mediados de agosto, pero Pombo rechazó continuar su carrera en el conjunto extremeño. De Segunda también ha tenido el interés de equipos como el Oviedo, el Cádiz o el Racing. La vía de jugar en el extranjero también fue descartada por el futbolista, pese al interés del Zaragoza en que pudiera llegar a la MLS para obtener un traspaso importante por él. También hubo opciones de ir al Qarabag, de Azerbaiyán.

A Pombo, con un salario de unos 85.000 euros, le queda un año de contrato y, si finalmente se queda, a partir del 1 de enero será libre para negociar con otro club con vistas a la siguiente temporada, donde saldría con la carta de libertad. El caso es que el Zaragoza, que inicialmente tasó al futbolista a comienzos del 2019, cuando su renovación entró en un punto sin retorno, en unos tres millones de euros con el interés de equipos de Primera como Levante o Getafe, que a principios del verano pretendía obtener 1,5 y que después bajó sus pretensiones a un millón, cantidad que por ejemplo solicitó al Extremadura, tiene ya muy difícil obtener un traspaso por el jugador.

En todo caso, Pombo está inscrito y, si se queda, lo hará en la plantilla, aunque en teoría con pocas opciones de jugar para Víctor, pero que no sería el primer caso de un futbolista transferible que transforma su situación. Pero no es sencillo que suceda. En el resto de salidas tampoco es factible que se den hoy. Linares y Bikoro van a quedarse, salvo sorpresa, el Zaragoza no deja salir a Lasure cedido al Girona y el interés de algún equipo de Primera no se tradujo en una oferta en firme, mientras que las propuestas que hubo por James no fueron consideradas suficientes por un jugador vital para Víctor.