El Real Zaragoza se ha puesto en marcha esta mañana de lunes con los reconocimientos médicos que les ha hecho a todos los miembros de la plantilla en la Ciudad Deportiva, unas pruebas que llegan tras casi dos meses después de la última sesión de entrenamiento del equipo y que son las que se realizan antes de comenzar una pretemporada. Es el primer paso antes de los test del coronavirus que se realizarán mañana martes a los jugadores, que consistirá en un PCR y una prueba de anticuerpos y cuyos resultados se conocerán en las 48 horas siguientes. La idea del club aragonés es que el viernes o a más tardar el lunes 11 comiencen los entrenamientos individuales en la Ciudad Deportiva, donde también se ha llevado a cabo un proceso de desinfección de sus instalaciones este lunes para cumplir con el protocolo dictado por LaLiga. Estos días, los jugadores combinan el ejercicio en casa que han hecho durante el confinamiento con el trabajo aeróbico en el entorno de sus respectivos domicilios.

“Los futbolistas, el cuerpo técnico, los miembros de los servicios médicos y el personal del club que desarrolla una labor más cercana al primer equipo se someten este martes a un control sanitario para cumplir con las exigencias de los responsables deportivos y siempre en coordinación con las autoridades sanitarias”, ha explicado el club en su web oficial. Esas pruebas del covid-19 las tendrán que pasar todos los futbolistas de la primera plantilla, así como cuatro jugadores de la cantera (el portero Azón, Nick Buyla, Francés y Baselga), todos los miembros del cuerpo técnico que encabeza Víctor Fernández, el delegado, Alberto Belsué, y los miembros del cuerpo médico con Ireneo de los Mártires y los fisioterapeutas del club. Si alguno de ellos da positivo no podrá empezar esos entrenamientos y deberá pasar la cuarentena de al menos dos semanas en su domicilio hasta que dé negativo en los test.

Las pruebas se llevarán a cabo de forma ordenada a lo largo de la mañana y la tarde de este martes en la Ciudad Deportiva. Todas las personas acceden a las instalaciones con guantes y mascarilla y habrá un control para medir la temperatura en la entrada al recinto deportivo. Tras estas pruebas, se realizarán test de forma periódica a los jugadores.

Una vez que los resultados reflejen que los futbolistas y el cuerpo técnico están preparados para el inicio de los entrenamientos, comienzan las sesiones, de forma controlada, en los campos habilitados para ello, manteniendo siempre como mínimo el doble de la distancia de seguridad solicitada en los jugadores y sin ningún contacto físico. No podrán coincidir más de 6 jugadores sobre el césped y 12 en las instalaciones. Las instrucciones de Víctor Fernández y el cuerpo técnico las recibirán por vía telemática en la noche anterior y también se les indicará el horario al que deben acceder a las instalaciones. Además, únicamente se permite el acceso de dos personas a la vez al gimnasio y se intensifica la labor higiénica y sanitaria si fuere necesario el trabajo de fisioterapia.

Las sesiones se desarrollarán en primer lugar de manera individualizada. Para ello se establece un orden que garantiza la seguridad de los jugadores y del personal autorizado para desarrollar su labor en la Ciudad Deportiva. No se utilizan los vestuarios. Los futbolistas llegarán a las instalaciones de la Ciudad Deportiva con la ropa deportiva desde su casa y llevando también las botas. Desde allí, regresan sin cambiarse ni ducharse y con la ropa limpia para la próxima sesión, en una bolsa en la que después guardarán la ropa usada, que devolverán para lavar al día siguiente. Quienes han de participar en esta primera fase acceden en sus propios vehículos, que tienen habilitado un espacio donde aparcar con la garantía de que existe la distancia suficiente entre los coches.

Todas estas tareas estarán supervisadas por LaLiga, que mantendrá un control sobre el uso de las instalaciones y la aplicación del protocolo. LaLiga ha mandado un protocolo a los jugadores y a los clubs para las dos primeras fases y en unos días mandará para las fases de entrenamiento medio y precompetición. En las instrucciones que desde el Zaragoza se les han dado a los jugadores, que llevan desde el 13 de marzo sin ejercitarse en la Ciudad Deportiva y desde el 8 de ese mes sin jugar, ya que el último partido fue en Málaga, se cifran los entrenamientos individuales hasta el 18 de mayo, mientras que a partir de ese día y hasta el 25 al menos llegarían las sesiones en grupos de ocho, el denominado entrenamiento medio, y después habrá una semana más a primeros de junio con grupos más numerosos, hasta 14 futbolistas, que será la fase de precompetición y otra semana antes del inicio de la Liga, siempre contando con la autorización de Sanidad, que sería ya para trabajar con toda la plantilla. El retorno de la competición, siempre a puerta cerrada, sería a mediados de junio como fecha más cercana.