Kadir Sheikh se ha encontrado con Javier Lasheras, lo que imposibilita, de momento, el desembarco que pretendía realizar esta tarde en el club el inversor alemán-paquistaní. El empresario aragonés comanda, con diferentes fórmulas, el paquete aCcionarial que en su día compraron a Agapito Iglesias, y por lo tanto su visto bueno para cualquier operación es ineludible.

La reunión de hoy, en la que se encontraban Mariano Casasnovas y los hermanos Zorita, se ha quedado en nada pese a que el grupo de Kadir se las prometía muy felices. Estaba previsto cerrar un acuerdo y presentar a Javier Láinez como presidente en un acto multitudinario en La Romareda, donde se había convocado a la afición via Twitter a las cinco de la tarde. Una ligera toma de contacto en el hotel Boston alcanzó para comprender que sin la firma de Lasheras, comprometido hasta esta noche todavía con un grupo mexicano, el resto de los actuales propietarios son papel mojado.

Con bastante retraso, nervios y la esperanza incomustible y razonada de Nayim, el grupo de trabajo de Kadir, quien acudió con su familia, apareció junto a las oficinas del club. Láinez explicó a los seguidores que, bajo ningún concepto, se pueden admitir ciertas condiciones --una de ellas que no acceda a la presidencia--. Sheihk, visiblemente afectado, no quiso hacer declaraciones.

Nayim, muy sereno, sí atendió a los medios de comunicación. Para el exjugador del Real Zaragoza "Lasheras tiene la llave" y esperan una llamada suya para desbloquear la operación. El ceutí aportó optimismo y argumentos personales. "Los mexicanos han desaparecido. Kadir viene con el dinero para pagar a los empleados y a Hacienda. No les queda otra que aceptar nuestra propuesta", dijo Gigi. "Ebtre hoy y mañana confíamos en que nos llame. Tiene que ser consciente del peligro que corre la institución, ya casi sin tiempo". Lasheras no tiene previsto hacer esa llamada.