Más allá del punto perdido, César Láinez se marchó muy molesto por dos cosas, porque su equipo terminó el partido metido en su área y porque, una vez más, no supo gestionar los minutos finales. «No estoy contento de cómo hemos acabado, con tres faltas concedidas y metidos en el área. Hemos sabido gestionar otros partidos en campo contrario acabando en el área rival y en casa, no. No aprendemos de los errores y nos está lastrando hasta final de temporada», explicó el técnico zaragozano. Láinez repitió en varias ocasiones esa misma idea, la de que su equipo no aprende de los errores.

El preparador del Zaragoza no quiso juzgar quién había podido equivocarse más en el gol del empate. «A ras de campo solo veo un disparo de lejos y que la pelota acaba dentro», indicó, pero volvió a incidir en que lo que le había molestado es «acabar dentro del área los últimos cuatro o cinco minutos. En otros campos no se juega en esos minutos finales y aquí con el marcador ajustado acabamos en el área. Y cuando uno acaba en el área, puede suceder lo que ha sucedido», señaló Láinez.

Sin embargo, a su juicio el Real Zaragoza sí supo dominar el partido y tuvo ocasiones para cerrarlo mucho antes. «El partido en general lo ha dominado el Real Zaragoza. Es cierto que sin tanto dominio como en otros partidos, pero jugábamos en campo contrario, hemos tenido una opción de Ángel a bocajarro, Xumetra ha tenido el 2-1... Pero son situaciones que no aprendemos de los errores y nos está costando salir de ahí abajo», repitió Láinez.

El entrenador también explicó que ahora mismo el estado físico del equipo es el que es, lo que le condiciona generalmente los cambios durante el partido, y que el equipo está comprometido. «Tenemos que valorar dónde estamos, el equipo lo ha dado todo, gestionando las lesiones, la gente que arrastra molestias, y es lo que tenemos. A mí me gustaría tener el equipo fresco y que fuera el primer partido de Liga, pero he cogido un grupo que está comprometido pero que no aprende de los errores».

Láinez argumentó sus tres cambios. «Cuando el Cádiz va perdiendo mete a Álvaro, un extremo tremendo de lateral, necesitábamos ayuda de Isaac en esa banda, por dentro necesitábamos fuerza porque Edu Bedia estaba cansado y necesitábamos altura y hemos metido a Barrera. El reglamento solo me deja hacer tres cambios, ya me gustaría poder hacer seis. No creo que haya sido meterse atrás, el equipo ha concedido menos que otros partidos. Pero también es verdad que al final cuando uno está abajo es por deméritos propios», concluyó César Láinez, que tiene trabajo por delante para que el equipo aprenda de lo sucedido.