El Real Zaragoza ultima la documentación para presentar ante LaLiga y la Federación Española de Fútbol la baja de Raphael Dwamena por su afección cardiaca, algo que tiene previsto realizar a finales de esta semana o a comienzos de la próxima para inscribir a otro jugador en su lugar. De hecho, el club aragonés negocia con el Atlético el fichaje de Darío Poveda, de perfil similar a Dwamena porque también es un ariete de envergadura física y con potencia para ir al espacio y sobre todo buen rematador en el área, para que ocupe su sitio. LaLiga autoriza a fichar a un jugador y a sobrepasar con hasta el 80% del salario que le restaba por cobrar al futbolista en casos de lesiones de larga duración con cargo al siguiente límite salarial de la próxima temporada y a eso se quiere acoger el Zaragoza para incorporar a Darío tras desestimar la opción del brasileño Jonathas, que se encuentra sin equipo

El Levante ya es conocedor de que el club aragonés va a pedir la baja federativa del futbolista y, en el momento en que se la conceda un tribunal médico de LaLiga (tardaría solo unos días), el Zaragoza tendrá 20 días hábiles para fichar, aunque la idea es que para entonces ya tenga cerrado el fichaje de Darío y pueda jugar cuanto antes con el primer equipo zaragocista.

Hasta ahora la baja de Dwamena no ha sido fácil de lograr porque el futbolista ha estado recabando diferentes opiniones médicas que acompañen el primer diagnóstico que realizaron los Servicios Médicos del Zaragoza. Tanto un especialista de Barcelona como el médico de confianza del punta ghanés en Zúrich le aconsejaron esa retirada inmediata para no poner en peligro su salud. Con todo, el futbolista ha seguido mirando especialistas, alguno más en Suiza y otros en su país, en Ghana, y por eso el proceso se ha dilatado mucho.

La otra causa está en los emolumentos del futbolista. El Zaragoza se hacía cargo de la totalidad de su ficha en su cesión por una temporada, unos 800.000 euros, y no hay un seguro médico que cubra este tipo de lesiones. Así, el club aragonés considera que solo tiene que abonar los tres meses iniciales hasta el diagnóstico de la enfermedad, pero desde el Levante se cree que tiene que hacerse cargo de la totalidad de la ficha, puesto que el jugador pasó la revisión médica en la entidad zaragocista, que era plenamente consciente de los problemas de corazón que Dwamena había pasado. De hecho, hasta el jugador habló de ello en su presentación con el Levante en el verano del 2018.

Al ghanés se le había implantado un holter para controlar su frecuencia cardiaca después de que no pasara la revisión médica para fichar por el Brighton en el 2017. Mientras, el Levante lo fichó del Zúrich un año después por 6,4 millones, su segundo traspaso más caro en la historia, y le sometió a unos exhaustivos reconocimientos médicos que también se le remitieron al Zaragoza cuando se acordó su cesión este verano.