Miguel Linares ya es el delantero más efectivo del Real Zaragoza. El tanto que el delantero de Fuentes de Ebro consiguió el pasado sábado ante el Elche supone el segundo en su cuenta particular cuando apenas acumula 301 minutos como jugador del equipo aragonés. La media es sencilla: Linares marca un gol como zaragocista cada 150 minutos, es decir, un tanto cada poco más de partido y medio. Nadie en la actual plantilla atesora un registro mejor.

Porque, hasta ahora, Álvaro Vázquez no solo era la gran referencia ofensiva del Zaragoza sino también su goleador más eficaz. El catalán, que se ha perdido los dos últimos partidos como consecuencia de la tercera rotura fibrilar de la temporada, ha marcado ocho goles en los 1.619 minutos que ha disputado desde que recaló en tierras aragonesas, lo que supone una media de un gol cada 202 minutos, es decir, algo más de tres partidos. Esa marca ya ha sido mejorada por Linares, que, si consigue mantener su media actual, marcará entre seis y siete goles más en los casi mil minutos que restan para la conclusión del campeonato regular.

El aragonés está, incluso, mejorando su promedio anotador con el Reus, con el que materializó cuatro tantos en 1.566 minutos antes de fichar por el Zaragoza. En la escuadra catalana, Linares anotaba un tanto cada cuatro choques, un registro que aquí ha conseguido reducir de forma notable.

El olfato de Linares, de hecho, le ha aupado ya a los primeros puestos en la clasificación de máximos realizadores de un equipo con una evidente y preocupante carencia de gol. Solo Álvaro (8 dianas) y Pombo y Ros (3) han marcado más goles que el zaragozano, que, entre los anotados en Reus y los que lleva ya en el Zaragoza, acumula ya seis en la presente campaña. Como blanquillo, ya ha igualado al otro delantero de la plantilla, Marc Gual, que también ha marcado dos en toda una temporada en la que ya ha disputado 1.467 minutos.

Y eso que Linares tan solo ha sido titular en tres partidos. El primero de ellos fue en Pamplona, donde el ariete disputó los primeros 75 minutos hasta ser sustituido por Pombo. Hasta entonces, había sido suplente en los tres duelos anteriores. Jugó los últimos 13 minutos en Las Palmas (1-1), alrededor de media hora en Lugo (1-2) -donde consiguió su primer tanto como jugador del primer equipo- y 17 más en casa frente al Albacete (0-0).

Tras Pamplona, Linares repitió titularidad la siguiente semana en La Romareda frente al Almería (1-2) aunque un problema físico le volvió a relegar a la suplencia en Granada (1-0). Sin embargo, el sábado completó su único partido completo como zaragocista ante el Elche, equipo en el que militó durante tres temporadas y al que marcó su primer gol con el Zaragoza en La Romareda. «Es una maravilla, son segundos que te gustarían que duraran una eternidad. Es una sensación que espero que se repita muchas veces», dijo el delantero aragonés.

Además, fue el tanto más tempranero de la temporada -a los cuatro minutos- y sirvió para acabar con varios maleficios que perseguían al equipo aragonés. Como la racha de cinco meses sin marcar en una primera parte disputada en La Romareda. También permitió al Zaragoza adelantarse en el marcador, algo que solo había ocurrido una vez desde que llegó Víctor Fernández. Y, por supuesto, fue determinante para sumar la cuarta victoria del ejercicio como local, uno de los registros más pobres en toda la historia del club.