Pablo Machín, entrenador del Girona, espera un Zaragoza más conservador en Montilivi, porque "le puede servir el empate e intentarán jugar con nuestra necesidad, ya que tienen futbolistas muy peligrosos en el contragolpe", aseguró el técnico, que ve a un rival mejorado en los últimos tiempos. "Es un ex de Primera y los últimos resultados le han aliviado un poco, porque no lo estaba pasando bien. Lleva varios empates en las últimas salidas y no será fácil superarles, porque han ganado en solvencia. Nombres e historia al margen, es un equipo más de la categoría ahora y saldremos con la intención de ganar".

Al conjunto catalán no le queda otra, de hecho. Es colista y tiene la permanencia a 4 puntos, por lo que solo le vale vencer: "Para lograr la permanencia dependemos de nosotros mismos, por lo que la clasificación ya la miraremos tras el partido. La única alternativa, la obligación, es ganar. Las cuentas las dejamos a posteriori", sentenció.