La posesión del balón es un aspecto del juego que marca muchas veces la capacidad de un equipo para controlar un partido, y así lo ha entendido el nuevo técnico, Ranko Popovic, que desde su llegada al Zaragoza hace cuatro jornadas está tratando que sus jugadores sean los protagonistas controlando el tempo del encuentro. Aunque de forma muy ligera, las cifras de posesión han mejorado en el último mes coincidiendo con la llegada del serbio en sustitución de Víctor Muñoz, quien a pesar de contar con peores números en lo referente a la posesión consiguió prácticamente los mismos resultados. El equipo marcha a un punto de la zona de promoción que marca la Ponferradina, mismo registro que cuando se marchó el preparador aragonés.

Durante los primeros 14 partidos, con Muñoz en el banquillo, el Zaragoza terminó sus encuentros con una media del 47% de la posesión, casi siempre peor que sus rivales. Solo en las jornadas seis y siete logró acaparar el balón más que su rival. En ambas ocasiones el Zaragoza se llevó la victoria y lo hizo manteniendo su puerta a cero. En la sexta jornada derrotó por 0-1 al Llagostera y en su siguiente compromiso se deshizo en La Romareda del Mallorca por 2-0. Ambos encuentros coincidieron con los minutos más completos de Ruiz de Galarreta desde su llegada.

Además de estos dos partidos, con Víctor Muñoz el Zaragoza igualó en posesión ante Sabadell y Racing, no saliendo derrotado en ninguno de los dos choques. En los 10 encuentros restantes con el entrenador zaragozano el equipo quedó siempre a expensas del rival en términos del dominio del balón, siendo en la derrota ante el filial de Barcelona donde quedó más lejos de su media, con solo el 43%. También el empate en Lugo dejó una de las cifras más bajas de posesión de la era Víctor Muñoz.

Después de la derrota en Soria y tras cuatro jornadas sin ganar, Popovic sustituía a Muñoz y comenzaba a trabajar con una idea que ya en la rueda de prensa de presentación repetía como un mantra: "Me gusta dominar los partidos y defender con la idea de recuperar pronto el esférico. Quiero que mis equipos tengan la máxima posesión para tener poder y conseguir ser efectivos". El serbio debutó en La Romareda ante la Ponferradina y, aunque logró una rotunda victoria por 4-1, los datos de posesión fueron favorables al conjunto berciano. En su siguiente compromiso en Albacete tampoco el equipo consiguió arrebatarle al balón a su rival y quedó con un 48%.

Todo comenzó a cambiar hace dos jornadas ante el Girona. El equipo de Popovic, a pesar de comenzar perdiendo, remontó dominando el esférico hasta el final y sumando un 53%. Tras 10 encuentros, por fin se imponía en el aspecto de la posesión a un equipo de la parte alta. Y esta leve mejoría se veía refrendada el sábado ante el Mirandés. A pesar del empate final otra vez los zaragozanos lograban imponerse a su rival en el dominio del balón (53%). Ambos partidos han tenido un denominador común: Eldin ocupaba la mediapunta que, durante la estancia de Muñoz, era coto privado de Willian José. Tras estos dos últimos partidos, Popovic ha invertido levemente la tendencia anterior. Con él, el Zaragoza ha pasado del 47% al 50,75% de posesión.