--El Almería va segundo y cambia de entrenador. Es difícil explicarlo. ¿Lo hacen ustedes en la plantilla?

--Son decisiones que se toman, nosotros estamos para trabajar, para entrenar duro y dar el máximo y ponernos a disposición del equipo. Llevo muchos años en el fútbol y siempre te puede sorprender. Pedro Emanuel ha hecho una labor magnífica y con Guti vamos a ir a por todas con él. Nosotros ni lo vemos necesario ni lo dejamos de ver, son cosas del club, del dueño. Nosotros, a jugar al fútbol y ya está.

--Si cambian de entrenador siendo segundos es que solo vale ser primeros…

--Pero es que la inversión que ha hecho el nuevo dueño y los jugadores que ha traído ponen al club en esa situación de mirar al ascenso, porque la exigencia es máxima. Este club se merece estar en Primera y tenemos que trabajar muy duro para llegar a los últimos partidos con esas opciones de ello.

--Usted ya estuvo en una etapa anterior en el Almería y ahora llega cedido por el Leganés. ¿Qué ha cambiado el club con la llegada de Turki Al-Sheikh?

--En muchas cosas, porque el dinero en el fútbol es importante y aquí ha dado ilusión y expectativas altas. Una inversión de esas dimensiones solo te puede traer cosas buenas. Y además está la formación, la cantera, el estadio que se quiere hacer, el proyecto a largo plazo… Todo eso beneficia a la ciudad y es un gran empuje para la entidad.

--¿Va a cambiar mucho el Almería con Guti en el banquillo?

--Los jugadores somos los mismos y en dos días no se pueden transformar demasiadas cosas. Guti viene con muchas ganas a implantar su gen, su ADN, y a hacerlo de la mejor manera posible, teniendo en cuenta que hasta esta jornada el rendimiento del equipo ya había sido muy bueno.

--Segundo contra quinto. ¿El Almería-Zaragoza es un partido por el ascenso?

--Los dos equipos estamos arriba y ahora mismo es un partido por esa zona, pero es que estamos todavía en la jornada 15 y resta un mundo, con muchos posibles cambios por el camino. Eso sí, yo creo que los dos equipos vamos a luchar por ese objetivo al final y estoy convencido de que va a ser un choque bonito de ver y que al final ojalá caiga de nuestro lado.

--¿Qué le parece el Zaragoza?

--Un gran equipo y un club tan importante y tan histórico. Empezaron en una dinámica muy buena, ganando varios partidos y después les costó un poco más, pero vienen de hacer un gran encuentro ante Las Palmas, ganando con claridad. Vendrán con las pilas cargadas seguro. El Zaragoza es muy serio atrás, con delanteros rápidos arriba, aunque no esté Luis Suárez, que ha empezado muy enchufado.

--Seis meses estuvo en este club en la temporada 16-17 hasta que se marchó cedido por el Sevilla al Levante.

--Tuve la suerte de jugar en el Zaragoza, sé lo que es la entidad, el club y la afición. De mi época queda Javi Ros, también Ratón, que va a jugar al no estar Cristian. Es un gran portero Cristian pero es que el Zaragoza tiene dos porterazos. A Álvaro le tengo mucho cariño, sé que lo va a hacer genial y que va a aprovechar en estos partidos su oportunidad.

--¿Con quién guarda contacto de entonces?

--Con Álvaro suelo hablar, también con Javi y con otros que ya no están como Álex Barrera o Bagnack. Tener ese contacto con personas que han pasado por tu carrera es una de las cosas más grandes del fútbol.

--¿Qué supuso el Zaragoza en su carrera?

--Fue mi primera vía de salida desde el Sevilla, no había salido de casa, era joven y lo hacía a un club de mucha historia. Por eso le tengo que dar siempre las gracias, aunque es verdad que me habría gustado estar más tiempo, que las cosas salieran de otra manera, pero el fútbol es impredecible. Llegué allí con ganas de comerme el balón, pero ahora echas la vista atrás y ves que hay veces que las cosas no salen y que no hay que darle más vueltas.

--¿Le pesó que Luis Milla, entonces entrenador del Zaragoza, dijera a su llegada que usted era un ‘pepinazo’?

--No me pesó, o al menos no lo sentí así. A todo el mundo le gusta que un entrenador diga esas cosas tan bonitas. Me sentí bien y a gusto en el Zaragoza y me fui con esa espinita de no haber estado más tiempo. Me fui con dolor, porque quería triunfar y hacer cosas importantes. Me marché dolido como lo habría hecho cualquiera, pero las cosas siguen y cada uno continúa con su camino

--¿Cree que ahora es un futbolista más completo, con una mayor capacidad de trabajo?

--Sí, seguro. Los años te dan saber lo que es la Segunda, la exigencia que tiene la categoría, el conocerse mejor a uno mismo. Yo he mejorado en la capacidad de trabajo y aún me queda, porque todos los futbolistas no tenemos techo en ese sentido de trabajar para el bloque. Y no soy el mismo que era con 20 años, ahora me siento un jugador más completo, más competitivo, con más experiencia.

--Es un discurso recurrente en muchos jugadores que pasan por aquí estos años que la camiseta pesa más en Segunda que la de cualquier otro club.

--No es que pese más, pero sí el Zaragoza es un club con esa exigencia que le da la historia porque en la mayoría de temporadas ha estado en Primera. Cuando firmas allí ese objetivo de volver a la élite está ahí y la afición empuja, aunque esas 25.000 personas apoyándote suponen una maravilla para cualquier jugador.

--Marcó tres goles, uno muy especial en Mallorca.

--Lo recuerdo bien, desde muy lejos. Es uno de los mejores goles de mi carrera y siempre lo recordaré. Es inolvidable.

--¿Qué le empujó a marcharse cedido al Levante?

--Tenía ganas de jugar, como cualquier futbolista que sale de su casa. Hubo ese cambio de entrenador de Milla a Agné y el nuevo no contaba conmigo, no me quería poner en el equipo.

--¿Se lo dijo Agné así o hubo algún enfrentamiento con él?

--No, no me lo dijo así, pero es que no hace falta. Ya se veía. Si no te mete en las convocatorias y no te pone es que está claro. Nadie es tonto en el fútbol, esas cosas se notan, pero enfrentamiento no he tenido ni con él ni con nadie en el fútbol, soy profesional y muy pacífico, ya que siempre respeto al resto de profesionales.

--Ha pasado por Segunda por el Zaragoza, el Levante, el Almería y el Alcorcón, con el que anotó 13 goles en su mejor año. ¿En Juan Muñoz hay un jugador de Primera?

--El del Alcorcón fue mi mejor año, es un club que apostó por mí y me puso para tener esa continuidad que todos los jugadores necesitamos. Allí sí pude demostrar todo el fútbol que llevaba. Lo que tengo claro es que Juan Muñoz tiene ganas de jugar muchos partidos en Primera, es mi sueño, pero esto es una carrera larga y cada uno está en el sitio que se merece.