Aunque con media semana todavía por delante y aún es pronto para lanzar las campanas al vuelo, Edu García está de vuelta tras pasar por el quirófano para que le fuera extirpado un testículo. Ese capítulo, afortunadamente, ya es historia. «Físicamente estoy bien. Me quedé sin vacaciones de Navidad para poder estar con los compañeros y esta semana he entrenado ya con el grupo», aseguró el centrocampista. De hecho, su idea «desde el primer día» tras la lesión era «estar disponible para el míster esta semana».

Eso sí, no sin sufrimiento durante estos días. Primero, por el hecho de tener trabajo extra durante las vacaciones y, en segundo lugar, porque en los entrenamientos se encontró «un poco pesado ya que me he pegado tirado en la cama doce días sin hacer nada», aunque añadió que «me vino bien para meter carga al cuerpo y estar bien físicamente para esta semana».

Edu García se propuso estar disponible ante el Girona para poder ayudar al equipo siendo sabedor de la importancia del choque del domingo. «Son tres puntos importantísimos y creo que estamos en una posición en la que estamos en disposición de todo y en la que, por el contrario, si nos relajamos no tendremos nada que hacer. Hay que ir a por todas», afirmó el extremo.

Sin embargo, el conjunto catalán llega segundo a La Romareda, un campo que se le da especialmente bien en los últimos años y, para el extremo, «es un gran equipo y no es casualidad que esté donde está», aunque, jugando en casa, «si hacemos lo que tenemos que hacer, aquí no nos gana nadie», aseveró el zaragozano.

Salidas y deseos

«Estoy encantado con los que somos», contestó Edu García cuando fue preguntado por las posibles salidas. Sin embargo, es consciente de que «esto es fútbol y los equipos van cambiando jugadores», aunque no escondió que, para él, que «cualquier compañero saliera sería una pena porque hay un gran ambiente en el vestuario».

Por último, el aragonés comentó sus deseos de cara al nuevo año. A nivel personal, quiere «seguir trabajando a tope y cogiendo minutos» y, en el plano colectivo, «el deseo que todos los zaragocistas pedimos cuando nos comemos las uvas es el que todos sabemos». Nada más y nada menos que el ascenso. «Ojalá que así sea», concluyó Edu García.