A estas alturas del campeonato de Liga no hay margen de error. Cualquier tropiezo exige una reacción instantánea, ya que prolongar una mala dinámica puede despedazar los sueños que se han ido mimando a lo largo de la temporada. «Lo importante es como respondes ante una adversidad», explicó Natxo González. La derrota contra el Rayo no ha torcido la dirección fijada en la hoja de ruta, puesto que el conjunto zaragozano sigue teniendo en su mano la posibilidad de alcanzar las posiciones de privilegio. El Real Zaragoza es dueño de su destino más inmediato, algo que refuerza sus aspiraciones de pelear por el ascenso: «Estamos con la ilusión intacta en estas últimas siete jornadas. Mañana querremos transmitir esa ilusión», dijo Natxo.

El telón cayó tras perder en Vallecas. Esa remota ilusión por incrustarse entre los dos puestos más elitistas se esfumó por completo, pese a que nunca llegase a ser el objetivo prioritario. El sueño resultó ser una utopía, fuese real o no se demostró que esa meta está, por el momento, muy alejada de las aptitudes del equipo. Lo más próximo es la promoción, la batalla real: «Lo que han transmitido los jugadores esta semana es que estamos en el objetivo que nos habíamos planteado a principio de temporada, incluso en diciembre o enero», relató Natxo.

Las calculadoras comienzan a echar humo ante la marabunta de escuadras que van a desvivirse en cada choque por aferrarse a una de esas cuatro posiciones de promoción. La igualdad provoca que cada año sea más caro llegar al play off’. El curso pasado fueron necesarios 63 puntos, una cifra que, para Natxo, «no será suficiente, habrá que hacer más de 64 puntos para clasificarse».

La derrota sirvió de enseñanza para aquellos futbolistas que se estrenaron en un partido grande bajo el marco de la Segunda División. También dio lugar al análisis para preparar las próximas citas ligueras. Natxo González valoró de forma positiva el nivel mostrado desde la retaguardia, uno de los puntos que más se ha buscado robustecer ante la cantidad de ocasiones que los aragoneses han recibido en contra: «Salí muy orgulloso con el nivel defensivo. Desde mi punto de vista lo mejor que tuvimos el otro día fue la defensa, que se rompió por una genialidad de un jugador top de la categoría y luego por un mal pase por dentro». Este marcador adverso sacó al Real Zaragoza de la promoción, una condición que podrá recuperar hoy en La Romareda en el caso que se consiga un nuevo triunfo como local.

Se trata de un partido que enfrentará a equipos pertenecientes a diferentes castas, pero necesitados de un triunfo para sus objetivos: «Ellos tienen mucha necesidad, pelear por un descenso es muy traumático, pero nosotros peleamos por una cosa muy bonita», explicó Natxo. Por la retina blanquiazul aún circula la derrota sufrida en Los Juegos del Mediterráneo. En suelo andaluz se produjo la derrota más abultada de la temporada, con ese 3-0 endosado por los almerienses. «Fue una derrota dura, además se produjo dos semanas después de Huesca. Ahora el fútbol nos da la oportunidad para demostrar que no tenemos nada que ver con aquel equipo», dijo Natxo.