El comité técnico de árbitros no ha adjudicado partido alguno a Areces Franco, protagonista el pasado sábado al no expulsar al defensa del Lugo, Carlos Pita, a pesar de que el central realizó una dura entrada por detrás a Dwamena siendo el último hombre y cuando el delantero zaragocista se disponía a disparar a puerta. En las designaciones para el próximo fin de semana no aparece el nombre del árbitro asturiano para ser colegiado en el VAR, destino de cada trencilla la semana después de haber arbitrado en el campo.
La medida responde a una práctica habitual del comité para proteger a los colegiados que han protagonizado episodios polémicos el fin de semana y aplazar su exposición para evitar más problemas. De este modo justifica el organismo este tipo de decisiones a las que elude considerar como sanción o castigo.
No se adoptan medidas, sin embargo, con el árbitro que el pasado sábado actuó en el VAR, Varón Aceitón, designado para dirigir en el terreno de juego el choque que medirá el sábado al Alcorcón con el Extremadura en Santo Domingo. La siguiente jornada volverá al VAR en Tenerife, pero con López Toca como árbitro de campo. La pareja se separa.
Areces solo estará fuera una jornada ya que volverá al ruedo en la novena jornada. El asturiano dirigirá, según ha podido saber este diario, el Albacete-Racing que se jugará el martes 1 de octubre a las 19.00 horas. De este modo, el comité decide no prolongar la ausencia del trencilla más allá de una jornada, aunque en Albacete contará con la ayuda del madrileño Ortiz Arias desde la sala de videoarbitraje.
El cambio de pareja es lo habitual en las designaciones. De hecho, lo extraño es que se elija un mismo dueto en dos partidos. Y mas aún tan próximos en el tiempo, como sucedió con Areces y Varón en el Zaragoza-Elche y el Zaragoza-Lugo.
Porque ya sorprendió sobremanera la designación de Areces Franco para el encuentro del pasado sábado después de que, tres semanas antes, también hubiera dirigido al Zaragoza en La Romareda frente al Elche (1-0). Entonces, el trencilla rectificó en la recta final del duelo tras ignorar una falta al zaragocista Luis Suárez que el VAR sí detectó. Varón Aceitón, el mismo que estaba destinado a la sala de videoarbitraje ante el Lugo, invitó a Areces a observar la jugada a través de la pequeña pantalla y el árbitro rectificó y señaló la pena máxima que el propio transformó otorgando la victoria al Zaragoza.
La extraña designación provocaba que un árbitro repitiera presencia en un mismo escenario en menos de un mes, algo que, aunque no es demasiado habitual, sí sucede con cierta frecuencia. El reglamento interno que rige las decisiones del Comité de Designaciones recomendaría evitarlo, al igual que la opción de que un mismo árbitro dirija dos veces en casa o dos veces fuera a un mismo equipo en una vuelta, pero no parece que estas dos premisas sean de obligado cumplimiento ya que a lo largo de la pasada campaña se dieron varios casos en los que no se cumplió alguna de estas dos indicaciones.
Así, el propio Varón Aceitón dirigió al Reus en casa dos veces en menos de un mes -el 17 de noviembre ante el Extremadura y el 15 de diciembre frente al Córdoba-. Además, ya había arbitrado al equipo catalán en la novena jornada en Gijón. Sagués Oscoz, por su parte, también repitió en el campo de Las Palmas en las jornadas 10 y 18 e Iglesias Villanueva dirigió dos veces a Oviedo y Elche en casa en una sola vuelta.
Por otra parte, el partido que enfrentará el próximo domingo al Zaragoza con el Oviedo en el Tartiere será arbitrado por el castellano-manchego Díaz de Mera mientras que el colegiado del VAR será el gallego Pérez Pallás.
