Llega el día que marca un antes y un después en la historia reciente del Real Zaragoza. La SAD vive esta mañana un cambio trascendente, con una Junta General Extraordinaria, convocada en primera instancia en la sala de prensa de La Romareda a las 10.00 horas y en segunda instancia mañana, que va a suponer la constatación del paso al frente que da César Alierta y que avanzó este diario el pasado 30 de mayo. Alierta, mediante la capitalización de deuda por valor de 1,86 millones para que el capital social llegue hasta los 6,38 millones, va a pasar a controlar de forma directa el 49% de la SAD. Es decir, va a poseer la mayoría teniendo en cuenta que hay en torno al 10% del capital muy repartido entre pequeños accionistas, mientras los otros tres patronos de la Fundación Zaragoza 2032, Carlos Iribarren, Juan Forcén y la familia Yarza, verán reducida su presencia. Esa capitalización de deuda no tiene efectos sobre el límite salarial permitido por la Liga, que es de algo más de 6 millones para esta temporada.

En el orden del día de la Junta General Extraordinaria, convocada a finales de junio por el consejo de administración, se dispone como punto segundo el «aumento de capital por compensación de créditos en un importe de hasta 1,860,492 millones de euros y consiguiente modificación del artículo 5 de los Estatutos Sociales». Hasta ahora, la familia Alierta, a través de Prado de Altaoja, es el mayor accionista, con el 27,9% del capital social. Mientras, la familia Yarza, con Gredinco, Carlos Iribarren, con Tecnoiragin, y Juan Forcén, con Sport Around The World, se reparten un 19,02% cada uno.

DOS NUEVOS CONSEJEROS

Esa división nació de la ampliación de capital llevada a cabo en marzo del 2015 para pasar de los dos millones de euros a los 4,5 actuales en una ampliación por compensación de créditos que entonces fue suscrita en su integridad por los cuatro patronos de la Fundación Zaragoza 2032. Ahora, el mapa cambia considerablemente, pasando a controlar la mayoría del capital la familia Alierta, teniendo en cuenta que el expresidente de Telefónica controlará ese 49% a título personal o a través de su sociedad.

Además, en el orden del día también está reflejado en el punto cuarto el «nombramiento y reelección, en su caso, de consejeros de la sociedad». Al margen de la salida de hasta dos de los consejeros actuales está previsto que se nombre como nuevo miembro del consejo de administración a Luis Blasco Bosqued, expresidente de Telefónica Argentina y de Movistar y muy ligado en el pasado a los medios de comunicación. Es una persona de confianza de Alierta, con quien mantiene una estrecha relación y es también uno de los pequeños accionistas del Zaragoza, con un paquete que ronda las 300 acciones, además de que su padre fue directivo ya del club. Y también entrará en ese órgano rector Juan Uguet de Resayre, sobrino de Alierta y gestor de las inversiones del expresidente de Telefónica a través de Augustus, gestora de la sicav (sociedad de inversión de capital variable) de su tío, Lierde.

Así, Alierta tendrá en el consejo de administración, además de a su sobrino, Fernando Sainz de Varanda, actual vicepresidente de la entidad, a dos personas de su más absoluta confianza, reforzando su papel en la SAD, en el día a día de la misma, no solo en su capital. Mientras, la Fundación Zaragoza 2032, que salvó al club de la desaparición en el 2014, va a perder mucha presencia. Ha sido hasta el momento un órgano colegiado en sus decisiones, donde Alierta, pese a ser el que más capital había invertido, no ha ejercido ese papel predominante que indicaban las cifras. Ahora, sí lo hará.

Hace tiempo que César Alierta quería ganar peso dentro del club, pero es en estos últimos meses cuando esa idea ha tomado cuerpo en forma de capitalizar parte de los préstamos participativos que tiene concedidos al Zaragoza desde Prado de Altaoja. Hay que recordar que la fundación ha aportado, mediante préstamos o aportaciones de capital, unos 22 millones de euros, de los que una parte importante ha llegado desde César Alierta.

CÉSAR Y ANDER

El cambio es, pues, importante en la SAD y traerá más a medio y largo plazo, ya que sigue muy abierta la posibilidad de que entren nuevos inversores en el club y se pueda llevar a cabo una refinanciación de la deuda, que en la actualidad es de 80 millones de euros, de los que 66 son a terceros. Esa deuda ahora mismo está imposibilitando que el club tenga un límite salarial mayor, además de que en Segunda esas obligaciones convierten a la SAD en inviable en esta categoría, ya que arrastra un déficit de caja que ronda los cinco millones anuales, que se ha ido salvando mediante las aportaciones de la fundación y algunos traspasos. Esa refinanciación y la entrada de capital sí permitirían un límite salarial mayor.

Además, otra posibilidad a medio o largo plazo es implantar otro modelo de gestión deportiva en la entidad. También sigue latente la opción de una posible entrada de capital a través de los exzaragocistas Ander Herrera y César Sánchez, que están dispuestos a aportar hasta dos millones. Las negociaciones no llegaron a fructificar, aunque esa vía no está cerrada, ni mucho menos, pero no dio tiempo a que cristalizara antes de la Junta que se celebra hoy.