Vuelven a encenderse las alarmas con Papunashvili. El georgiano, cuya participación en el equipo fue muy reducida durante la pasada temporada debido a los problemas derivados de un edema óseo en su tobillo izquierdo, se retiró ayer de la sesión preparatoria matinal con problemas en esa misma zona.

Con gestos de dolor, Papu se marchó a los vestuarios con evidentes gestos de dolor tras un mal apoyo en un rondo de calentamiento que le podría haber provocado un posible esguince, aunque serán las pruebas médicas a las que va a ser sometido en las próximas horas las que dictaminen si, efectivamente, Papu sufre una nueva lesión.