El entrenador del Real Zaragoza, Paco Herrera, ha señalado hoy que el futuro del equipo tiene que ser "ambicioso" y que "no puede ser de otra manera".

"Sentirnos superiores a los demás respetándolos porque creo que tenemos un equipo capaz de eso. El único objetivo ahora es no bajar de donde estamos, cuartos, sino subir. Subir al tercero y tratar de pelear la segunda o la primera plaza", ha declarado a Real Zaragoza TV, donde ha hecho un balance de lo que ha sido la primera vuelta liguera que se cerró el pasado domingo contra el Alcorcón.

El preparador zaragocista considera que viendo las situaciones que el club maño ha padecido en la primera vuelta puede considerar como buena la clasificación pero no el fútbol desplegado.

"Somos capaces de mejorar en lo futbolístico y en los dos últimos partidos lo hemos hecho. El equipo va creciendo y las posibilidades de ir escalando puestos y de jugar mejor y hacer disfrutar a la afición están en nuestras manos", ha comentado.

Paco Herrera ha aseverado que el 90% de los equipos que descienden de categoría sufren y ha puesto como ejemplo al Sporting, al Deportivo o al Mallorca.

El preparador zaragocista opina que su equipo ha pasado ya "la gripe importante de la remodelación de la plantilla" y que ahora espera que se pueda ver a un equipo que "solo hable de victorias, buen fútbol y de ganar con solvencia" y no como hasta ahora que lo hacía "a empujones".

Paco Herrera ha explicado que durante la primera vuelta el Real Zaragoza ha llegado a tener hasta cinco jugadores titulares lesionados por bastante tiempo y que eso no ha ayudado porque hubo que cambiar los planteamientos después de haber realizado una pretemporada enfocada de otra manera.

"El equipo no ha jugado como yo quería. He cambiado cosas, como ser más práctico, pero eso quedó atrás y el equipo puede volver a una idea más parecida a lo de la pretemporada. Eso nos tiene que dar la tranquilidad que nos sirva para transformarla en rendimiento", ha destacado.

Paco Herrera ha reflexionado que con las adversidades por las que ha pasado su equipo podían ocurrir dos cosas, o que fuera un desastre y que no aguantara el tirón por no tener la personalidad y el carácter para manejarse en tiempos difíciles o lo contrario, que es lo que ha sucedido.

"A medida que las hemos pasado han servido para que el grupo se uniera más y creo que no hay ningún club que haya tenido los problemas que hemos tenido nosotros, pero ahora somos mas fuertes", ha subrayado.

Sobre la difícil relación que ha mantenido el equipo con la afición de La Romareda, que en bastantes partidos le ha recriminado su mal juego, el preparador del conjunto aragonés ha señalado que cuando hay un desafecto de ese tipo la única manera de arreglarlo está en manos de jugadores y técnico.

"Es nuestra responsabilidad enganchar a la gente y no lo hemos conseguido en la primera vuelta porque no lo hemos hecho bien. Ahora estamos en ese camino bueno, hemos hecho un buen partido contra el Sporting y en casa frente al Alcorcón y la gente nos ha recompensado con aplausos y ánimo y espero que sigamos en esa senda. No hay que pedir sino dar", ha destacado.