Tres de los últimos cuatro goles del Zaragoza han tenido el servicio de 'catering' de Bermejo, o de 'Bermejito', como lo suele llamar Juan Ignacio Martínez. El menudo futbolista, fijo para el entrenador alicantino desde que superó tras el parón navideño la rotura en el aductor derecho y titular en las ocho últimas jornadas, ha alumbrado con su zurda exquisita los remates de cabeza certeros de Vigaray en Málaga, tras una falta, y de Jair, en Sabadell en un córner, y dio ante el Tenerife la asistencia a Álex Alegría tras romper a Pomares con una conducción con la izquierda y enviar con la diestra un medido centro a la cabeza del punta extremeño, un caramelo para cualquier goleador que se precie.

Así, solo la primera diana en Málaga, marcada por James tras la combinación con Narváez en una jugada iniciada por Vigaray, se escapa al influjo del mediapunta madrileño, que eso sí ha perdido protagonismo en el juego de ataque zaragocista en los últimos partidos. Está apareciendo de manera más decisiva, o algunos días, como ante el Alcorcón o el Oviedo, ni eso, pero entra menos en contacto con el balón, es menos influyente en el juego de ataque.

Bermejo, baluarte ahora en la estrategia, rol que comparte con Zapater, puede jugar en cualquiera de las tres posiciones en la mediapunta, incluso por delante del pivote en un 4-3-3, pero su lugar ideal y donde más a gusto se siente es por detrás del delantero o, si el equipo juega en rombo, en su parte superior, justo a la espalda de los dos arietes. El sábado, ante el Tenerife, repitió ubicación en la derecha, donde más lo está colocando JIM, que giró su sistema para pasar a un 4-4-2, con Narváez y Alegría en punta y Chavarría en la izquierda y Bermejo vivió una tarde apagada salvo en el resplandor de sus asistencia a Alegría. 15 pases precisos, tres centros completados y 40 veces que entró en contacto con el balón fueron sus datos, además de los 5 regates realizados, de los que completó 4. Acumuló algunas pérdidas y no encontró casi nunca a los delanteros. Casi nunca, porque en el gol sí dio con Alegría.

Bermejo jugó también escorado a la banda derecha en los duelos ante el Málaga y el Sabadell fuera de casa y contra el Alcorcón en La Romareda, mientras que en el Tartiere la entrada de Larrazabal centró su posición por detrás de Alegría, aunque sin una clara mejoría en su capacidad ofensiva.

Con JIM y cuando se recuperó, el mediapunta madrileño empezó a gran nivel, marcó ante el Logroñés, en su partido más completo y ahora está siendo decisivo con sus asistencias. Para el alicantino es vital por su calidad, por esa zurda y su desparpajo en un equipo que no va sobrado de talento, aunque eso implique acostarlo en la banda derecha, a pierna cambiada. Allí, 'Bermejito' pierde presencia, pero la que está teniendo en los últimos partidos está siendo absolutamente vital.