Se acabó. El Real Zaragoza hizo oficial lo que ya era un secreto a voces desde que, la pasada semana, el club había anunciado un principio de acuerdo con Pombo para la renovación de un contrato que expiraba el próximo 30 de junio. Poco antes de que Víctor Fernández ofreciera la rueda de prensa previa al partido ante el Lugo, la entidad hizo oficial que el canterano ya ha estampado la firma que le unirá al Zaragoza hasta el año 2023.

Finalmente, el acuerdo ha sido por tres temporadas y no cuatro como se había acordado al principio. La oferta inicial del Zaragoza establecía un contrato por cuatro años en los que su salario ascendería de forma progresiva desde los 180.000 euros del primero. «Estoy muy contento de seguir en el equipo de mi ciudad», aseguró Pombo al club tras anunciarse su renovación. El jugador admitía, sin embargo, que no lo ha pasado bien tras unas negociaciones duras que se han prolongado durante prácticamente un año. «Ha sido un año muy duro, pero ya ha pasado todo y ahora ya estoy más centrado y con muchas ganas de aportar al equipo y de darlo todo», expuso el mediapunta aragonés.

Pombo, que la pasada jornada dispuso de los primeros minutos de la temporada una vez anunciado el principio de acuerdo, había recibido un ultimátum del club tras la conclusión del mercado de fichajes, en el que no pudo darle salida. El director deportivo, Lalo Arantegui, anunció que el club rescataba la oferta de renovación que le hizo hace un año y le daba una semana de plazo para pronunciarse. «Pero si no acepta, será difícil que juegue», advirtió Lalo. Pombo tardó algo más, pero aceptó. El culebrón, ahora sí, ya ha terminado.