Javi Ros tiene claro lo que pondría en la quiniela en el Girona-Real Zaragoza del próximo domingo: un 2. El centrocampista navarro aseguró ser consciente de lo que se juega su equipo y apeló a la responsabilidad para salir a Montilivi a por los tres puntos a pesar de que a ambos contendientes les valga un empate para lograr sus respectivos y distantes objetivos. Con un punto el Girona será equipo de Primera División y el Real Zaragoza, de Segunda un año más. Por eso la mayoría de casas de apuestas han retirado ese partido. Sin embargo, si Ros tuviera que apostar no dudaría. «Pondría un 2. Vamos a preparar el partido esta semana para ir a competir e intentar ganar. Para ellos es importante también, pero es mucho más para nosotros porque nos jugamos la viabilidad del club. Es una responsabilidad muy alta», señaló el futbolista.

Ros tampoco dudó en calificar el duelo del domingo como «el más importante de la historia del club» a tenor de lo que hay en juego. El Real Zaragoza todavía no tiene atada la permanencia matemáticamente pero solo existe una combinación de nueve resultados que le condenarían al descenso. «Por desgracia no sé lo que es jugar por un ascenso, pero soy consciente de lo que nos jugamos. Nos estamos jugando la viabilidad del club y eso pesa mucho», incidió.

Otra cuestión en la que se mostró claro y rotundo fue a la hora de replicar las palabras de César Láinez tras el partido del domingo, autoinculpándose de todos o casi todos los errores del Real Zaragoza. «No puedo estar de acuerdo. Desde que llegó ha hecho un trabajo excepcional y se ha visto en la mejora del equipo. Lo pudo decir por cómo acabó el partido, pero él no es el culpable de que perdamos puntos en los últimos minutos porque es algo que nos ha sucedido toda la temporada. Es un grandísimo entrenador y no hay más que ver cómo el equipo ha mejorado con él», aseguró.

Sobre ese punto, la enorme cantidad de goles que el equipo recibe en los minutos finales, Ros no tiene una explicación. «No sé si es miedo, no sé realmente lo que es porque nos ha pasado muchas veces. Pero está claro que algo no hacemos bien. No sé cómo calificarlo pero en esos minutos finales no lo hacemos bien». Una muestra más fue el encuentro del pasado domingo contra el Rayo Vallecano, en el que el conjunto madrileño logró el tanto del empate en el minuto 93. «Otra vez la misma historia, otro golpe duro en el descuento. Estamos fastidiados. Después del partido el vestuario era poco menos que un cementerio. Pero bueno, hoy ya estamos más animados, hemos tenido el lunes y ayer para darle vueltas y ahora ya estamos pensando en el próximo domingo».

REACCIÓN COMPRENSIBLE / El vestuario acabó tocado y la grada, enfadada. Algo que los jugadores entienden. «Sin duda que sí, es otro palo más, otra decepción, y es totalmente entendible la reacción del público», explicó el centrocampista navarro. En cambio, otra de las cuestiones que no pudo explicar es por qué el Real Zaragoza lleva diez partidos consecutivos sin marcar un gol en las segundas partes. «Es otra cosa que no sé explicar. En las primeras partes hemos marcado goles en casi todos los partidos. No sé por qué en las primeras partes sí y en las segundas, no. Pero es algo que nos viene mermando y al final por eso también hemos perdido algunos partidos», razonó.

Javi Ros no quiso pronunciarse sobre la polémica surgida en Gerona por un vídeo en el que supuestamente un jugador de la plantilla insulta a un grupo de aficionados tras el partido del fin de semana en Tarragona. «Es algo que no nos importa ni nos preocupa, es algo de ellos. Nosotros tenemos que centrarnos en lo nuestro y no tengo nada que decir de eso». Por último, el navarro hizo un breve balance de su temporada. «No creo que sea el momento de autoevaluarse pero he tenido continuidad y momentos de todo tipo, en algunos me he sentido muy a gusto. Estoy satisfecho pero no contento con lo que hemos hecho», concluyó.