Jon Pérez Bolo ha armado un equipo competitivo y correoso, con calidad arriba, con Curro Sánchez, Pablo Valcarce o Panadero, además del eterno Yuri y con Sielva que es ahora mismo uno de los mejores centrocampistas de la categoría. Junto a él estará el exzaragocista Erik Morán y las dudas de Bolo se centran en la defensa, donde las bajas de Ríos Reina, decisivo en El Toralín en los dos saques de esquina que noqueraon al equipo entonces dirigido por Iván Martínez, Amo, sancionado, o Manu Hernando, además de la más que seria duda de Paris Adot dejan al técnico sin apenas margen, sobre todo en el eje, donde Yac Diori puede ser titular tras una lesión o puede reubicar a Adri Castellano y pasar a Valcarce al costado.

Hasta siete ausencias tiene la Ponferradina, tres de ellas, Viedma, Larrea y Doncel, por coronavirus, lo que obliga a Bolo a recurrir al filial. «Nadie se esperaba al principio de la temporada que el Real Zaragoza estuviera donde está, pero poco a poco va saliendo de una situación complicada. Se están reforzando en el mercado y tirarán para arriba seguro. Será un partido difícil, pero si sacamos nuestra mejor versión nos da igual el rival que esté enfrente», aseguró este jueves el entrenador de la Ponferradina.