La endeblez en casa le supuso el descenso la temporada pasada y esa misma incapacidad para ganar en su estadio le ha dejado sin posibilidad de luchar por el ascenso a falta de un encuentro para el ocaso de la Liga Adelante. El Real Zaragoza se ha condenado en La Romareda: bajó con tan solo cinco victorias y esta temporada ha sumado siete en Segunda. El bagaje es desolador, enrojece y explica muchas de las causas que le han empujado a todos los abismos: 12 triunfos en 40 encuentros como local.