Roger anotó ante el Alcorcón su quinta diana del curso, lo que le supone igualar en el Pichichi zaragocista con Henríquez y Víctor y dar continuidad al gol que hizo en Gijón. El ariete valenciano por fin encuentra su sitio en el ataque zaragocista tras una primera vuelta donde su errática aportación le ha supuesto una losa difícil de derribar, a lo que tampoco ha ayudado su ubicación en muchos partidos, pegado a la banda y donde su velocidad y llegada se diluyen.

En Gijón y ante el Alcorcón, Roger ha jugado junto a Montañés, con otro punta, y ha ofrecido su mejor versión, la que aúna capacidad ante el gol al trabajo que siempre ofrece, y muy superior a cuando Herrera lo situó escorado en la banda o cuando se ha movido de único delantero, con todo el frente de ataque para él. En el valenciano habita un jugador interesante, explosivo por velocidad y honrado en su aportación. Hasta ahora, tampoco le había ayudado su poco acierto cara a puerta, pero está por fin en vena para redondear su momento. Ayer fue el mejor del partido. Posibilitó el primer gol de Barkero con un remate al alimón con el central rival, marcó el segundo en una jugada donde estuvo listo y rápido y generó el penalti y la roja de Babin. Es difícil ser más decisivo. Fue, sin duda, su mejor partido de zaragocista.

A este nivel, Roger, que llegó cedido por el Levante con el aval de Pitarch, puede aportar mucho y, además, servirá para despertar por fin a Henríquez, que tiene que espabilar mucho si quiere recuperar la plaza arriba. El punta valenciano, que colecciona 17 partidos, 13 de titular, y 1.110 minutos, marcó el primer gol zaragocista del curso, ante el Hércules (1-1) en el debut, firmó otro en el empate ante el Alavés (2-2) y la victoria en Las Palmas (0-1) y ahora lleva dos jornadas viendo puerta. En medio de ese camino, Roger, poco amigo de declaraciones grandilocuentes y demasiado tímido, ha pasado por altibajos, ha alternado la titularidad con el banquillo, pero él no bajó los brazos, mantuvo el trabajo, las ganas, y ahora, sin duda, es su momento.