Víctor Muñoz quiere que su equipo coja en Inglaterra, adonde llegó ayer por la noche después de haber entrenado por la mañana en la Ciudad Deportiva, la segunda respiración, el tono que exige un encuentro completo. Después de la primera fase de la pretemporada, con una exigente puesta a punto física en Nyon y cuatro partidos en los que los futbolistas tomaron contacto con el juego sin sobrepasar la barrera de los 45 minutos, hoy empieza un nuevo periodo de aclimatación competitiva. La resistencia, la fuerza y la velocidad del grupo han alcanzado un nivel considerable y debe quedar reflejado esta misma noche frente al Watford en el estadio Vicarage Road (Camino de la Vicaría), a partir de las 20.45 hora española. Habrá rotaciones, pero se empezará a vislumbrar quiénes, de verdad, serán los hombres de Víctor para la próxima campaña. Sólo hay un pero, y grande: falta cerrar la plantilla a la espera de lo que suceda con Movilla y Moreno estos días o con sus alternativas (Celades), lo que sigue dando a la pretemporada un aire de eventualidad.

En ese estado de tensa espera, el centrocampista rojiblanco se acercó ayer hasta el aeropuerto de Barajas para charlar con Víctor y con sus excompañeros, que tuvieron que soportar una hora de retraso en su vuelo. El Pelado estuvo más de hora y media cambiando impresiones con todos ellos, sobre todo con el preparador físico, Manuel Lapuente, y esquivó las cámaras de fotografía además de negarse a hacer cualquier tipo de declaración hasta que no se resuelva la enrevesada situación que se ha producido en su regreso pactado ya a La Romareda. Movilla dejó entrelíneas el mensaje de que cree que tanto él como Javi Moreno serán en breve jugadores del Real Zaragoza.

APLICAR LAS IDEAS Con o sin ellos, con otros o en compás de espera aún, será en el Teresa Herrera (13 al 15 de agosto), según el entrenador, donde se descubrirá el once titular que arrancará en la Supercopa frente al Valencia (21 y 24), si bien está gira por las islas servirá para seguir "afinando. A partir de ahora, después de haber cumplido ya un amplio periodo de preparación, aplicaremos los conceptos, las ideas", dice el preparador. Engrasada la máquina, es hora de que piense aunque sea sin maquinista todavía. Víctor insistió en que sus jugadores estarán en escena "durante 90 minutos", y sobre la inconveniencia de trabajar con vacíos en la plantilla, Víctor apuntó que se deben "adaptar a las circunstancias. El Zaragoza está mirando a otros puntos del mercado en busca de opciones fiables. Lo importante es que para el día 29, cuando comienza la Liga, estemos al completo".

La situación no deja de ser incómoda. El equipo juega hoy a 30 kilómetros de Londres y en los despachos de Zaragoza se dirime la batalla por reforzarlo de una u otra forma. Víctor, por lo tanto, podrá iniciar la partida de ajedrez, pero sin un par de piezas claves para la configuración definitiva del equipo que se acerque a su ideal. Sin ánimo de lamentaciones y a la espera de noticias, el conjunto aragonés aterrizó en Inglaterra con 23 jugadores, diez de ellos --Láinez, Zaparaín, Cuartero, Soriano, Generelo, Camacho, Zapater, César Jimémez, Cani y Capi-- que estuvieron o están en el filial, y la mayoría con peso específico de cara al futuro. Las miradas continúan puestas en el joven Alberto Zapater y la posibilidad de que, recién salido del juvenil de Carlos Rojo, se gane un puesto importante en el equipo. "Vengo aquí, igual que fui a Nyon, a disfrutar. En Suiza me sentí como uno más y espero que Inglaterra suceda lo mismo. Estoy aprendiendo mucho de mis compañeros", apuntó el centrocampista, que subrayó que Víctor no le ha ducho nada especial. "No, no me ha comentado nada especial sobre mi futuro".

ENTRENAMIENTO A las 21.00 horas, el Real Zaragoza llegó al hotel Bellhouse y no al Hilton Watford, como estaba previsto. Esta mañana, a las 10.30, la plantilla se ejercitará en la ciudad deportiva del Watford, y por la noche se medirá en el Vicarage Road al club local, un conjunto fundado en 1881 que milita en la Championship (la Segunda División) y cuya mejor época corresponde a la etapa en la que el cantante Elton John se hizo con la presidencia del equipo. Entre 1978 y 1982, con Graham Taylor en el banquillo, el Watford logró una serie de ascensos meteóricos en cuatro temporadas, de la Cuarta División a la Premier League. Fue subcampeón en el campeonato del 83 y finalista de Copa en el 84, título que se llevaría el Everton. Pese a su modestia actual y sin futbolistas de renombre, será un enemigo a tener en cuenta por su alto estado de forma, ya que este sábado empieza la liga en el campo del Preston.

Mañana, el Real Zaragoza se desplazará a Manchester para preparar, en la antigua ciudad deportiva del United, el encuentro que le enfrentará el sábado a las 15.00 horas al Bolton. Después del choque, está previsto el regreso a Watford a la espera de concretar un tercer partido. Si no se consigue, es posible que se adelante la vuelta a Zaragoza.