El Real Madrid se llevó los tres puntos de Cornellá-El Prat tras un gol de Pepe en el 55, superando un flojo inicio y demostrando, una vez más, que necesita muy poco para anular a un rival que no dispuso de ocasiones, salvo un peligroso disparo de Javi López en el 92.

El cuadro visitante, aun así, echó de menos la puntería de Cristiano, que erró varios goles, y se puso en manos de Modric, clave para entender su acoso constante. El 0-1 permite a los blancos recortar distancias con Atlético y Barcelona mientras que el Espanyol suma su tercera derrota consecutiva.

Los de Ancelotti salieron dormidos y no empezaron a soltarse hasta que pasó el primer cuarto de hora, cuando afloraron sus individualidades y aumentó el ritmo. No obstante, no le acompañó el habitual acierto de Cristiano, que erró algunas ocasiones claras de gol.

El conjunto madridista no tardó en cristalizar todo su trabajo anterior en la reanudación. Pepe adelantó a los suyos en un remate de cabeza, sin oposición dentro del área, tras una falta lanzada por Modric a la que el Espanyol no pudo contestar. El cuadro de Aguirre apenas pisó el campo contrario y se limitó a contener las incursiones madridistas, con un Modric muy activo y un Cristiano que siguió marrando numerosas ocasiones hasta el descuento.