El parón en marzo de la Liga le llegó a Jawad el Yamiq con solo mes y medio en el Zaragoza y siete partidos disputados, todos de titular y con un gran rendimiento. “Quiero regresar con mis compañeros a La Romareda y volver al ambiente de antes. Me pongo a ver los partidos que jugábamos en casa, porque echo mucho de menos esos días y ese ambiente”, asegura el central marroquí, que solo disputó dos partidos en casa antes de suspenderse la competición, ante el Fuenlabrada y el Deportivo, aunque también vivió en el palco el gran lleno que hubo ante el Real Madrid en la Copa. En todo caso, queda mucho tiempo para ese reencuentro con la grada, puesto que si acaba la Liga lo hará a puerta cerrada. “Esta situación es tan irreal que nunca pensé que podía suceder algo así, solo espero el día en que acabe todo esto y podamos volver para hacer disfrutar a la gente y llegar a nuestro objetivo”, añadió.

El Yamiq llegó a finales de enero cedido por el Genoa con una opción de compra obligatoria en caso de ascenso y voluntaria en Segunda de 750.000 euros. De momento, su nivel y su adaptación al club invitan a pensar en una continuidad que el central también desea. “La situación nos va a afectar no solo a nosotros sino a todos los demás equipos. La forma colectiva con la que jugábamos ahora mismo ha cambiado. Espero que volvamos a estar como antes para coger las fuerzas de todo el equipo”, aseguró el futbolista sobre un parón que pilló al Zaragoza segundo y en ascenso directo a falta de 11 jornadas.

El central está en Zaragoza con su mujer y su hijo pequeño e intenta “lidiar con la situación como cualquier persona normal, siguiendo las indicaciones que nos han dado, quedándonos en nuestras casas. Es una oportunidad para estar con nuestras familias, ya que los jugadores viajamos todo el tiempo”, asegura El Yamiq, muy pendiente de seguir las noticias de Marruecos, su país. “Hay unos 3.000 casos de coronavirus y espero que la gente se quede en su casa y respete el confinamiento. Mano a mano conseguiremos superar este virus”.

El parón y la estancia en casa también le está sirviendo para acelerar en el aprendizaje de español, además de seguir con las rutinas de entrenamiento que pautan los preparadores físicos. “No debemos parar y tenemos que seguir entrenando todos los días. Sigo la misma rutina que antes, la única diferencia es que no salimos de casa. Eso sí, echo de menos a mis amigos y a los compañeros, que somos como una familia. Espero que esto acaba cuanto antes y volvamos a juntarnos de nuevo”.

Al futbolista le ha impresionado en este tiempo la afición zaragocista, a la que manda dos mensajes. “El primero es que sigan las indicaciones sanitarias para que esto acabe cuanto antes y después quiero decirles que nosotros seguimos entrenando en nuestras casas para volver a La Romareda y sentir su apoyo. Estamos entrenando duro para volver y conseguir nuestros objetivos. ¡Vamos Zaragoza!”, concluyó