El futbolista del Hércules Héctor Yuste ha dejado en el aire su reaparición la próxima jornada contra el Zaragoza y ha apuntado que no volverá a jugar salvo que tenga la seguridad de que se ha recuperado correctamente de la luxación en el hombro que sufrió contra el Mirandés.

Yuste se perdió por lesión el choque que enfrentó al Hércules contra el Barcelona B y, a día de hoy, es dudosa también su participación en el envite de la próxima jornada contra el Zaragoza en La Romareda.

El centrocampista, que tiene el hombro inmovilizado todavía, apuntó que en los dos últimos días ha sentido "una gran mejoría", pero incidió en que antes de saber si estará en condiciones de jugar ante el Zaragoza "habrá que comprobar las sensaciones, probar si duele al correr y cómo funciona la férula" que se le colocará para que pueda jugar sin que se le salga el hombro de nuevo.

"Por lo general soy bastante positivo en mi vida, pero eso no quita que nunca he tenido lesiones en el hombro y que no sepa cómo me voy a encontrar en cuatro o cinco días. Si fuera por ganas, estoy ya, pero hay que saber que si el hombro se sale otra vez, habría que parar, operar y casi perderse lo que resta de temporada", advirtió.

Precisamente, reconoció que la posibilidad de que se le vuelva a salir el hombro es el "miedo" que arrastra porque "no se puede controlar una caída o un choque". Por eso, afirmó que "si juego será con seguridad de que el hombro va a responder bien". "Siempre hay que asumir ciertos riesgos, pero vamos a intentar minimizarlos", agregó.

Yuste lamentó que la lesión le haya llegado en un momento en el que se encontraba pletórico de confianza y físicamente bien, aunque reconoció que las lesiones le han respetado los últimos años y no había tenido que parar en "las tres o cuatro últimas temporadas".

Sobre la derrota del Hércules ante el Barcelona B (5-0), rechazó la idea de que su ausencia hubiera resultado clave y consideró que no fue más que un borrón en la buena trayectoria del equipo las últimas jornadas.

"Si se gana 0-2 nadie se hubiera acordado de mi hombro. Cuando se pierde parece un drama y el final del mundo y cuando se gana todo va bien. Fue un partido en el que no salieron las cosas, pero el equipo había hecho partidos muy serios, venía de una racha positiva y tampoco hay que buscarle más cosas", argumentó.

A la hora de hacer balance de la primera mitad del campeonato, se queda con la reacción del equipo las últimas semanas después de un "inicio complicado".

"Ahora el equipo ya sabe a qué juega, aunque no estamos donde nos gustaría", dijo y continuó: "Ahora empieza una segunda vuelta en la que podemos lograr todo aún. Está cerca el ascenso, el descenso, y hay que ser positivos", concluyó.