El Real Zaragoza se ha puesto manos a la obra en los últimos días para encontrar destino a Kagawa en la categoría de plata. El japonés, al que le queda un año de contrato, tiene que salir sí o sí antes del 4 del octubre, fecha límite del mercado porque si no se quedaría sin ficha al tener plaza de extracomunitario. Kagawa solo quiere continuar en España y sus agentes también están trabajando en esa salida, pero ahora mismo no hay una propuesta que le encaje al futbolista, aunque algunas conversaciones sí pueden fructificar en breve. Paralelamente, el club ha ofrecido al mediapunta a algunos clubs de Segunda, con la intención de, si no puede liberar toda su ficha, que supera los 400.000 euros, sí al menos una parte.

Kagawa tiene claro que en cuanto haya una propuesta que sea de su agrado facilitará al máximo su salida, incluso renunciando al año de contrato que le resta. No ha querido ir a la MLS, a Turquía o a Qatar, donde alguna propuesta que tenía superaba los dos millones de euros netos. Su deseo es seguir en España y en Primera hubo interés del Cádiz, ya descartado, mientras en Segunda hay varios clubs que podrían apostar por él, pero de momento no existen ofertas en firme. Mientras, el futbolista escribió en su cuenta de Twitter hoy un mensaje para ratificar su profesionalidad: "Aunque hay muchos rumores voy a concentrarme en lo que hay que hacer ahora. Voy a entrenarme bien como jugador del Zaragoza", aseguró.

A sus 31 años y con un currículum labrado en el Manchester United y en el Dortmund, Kagawa sacrificó mucho dinero el verano pasado por cumplir su sueño de jugar en España, en este caso en el Zaragoza. El mediapunta terminó la temporada a mejor nivel que en el irregular rendimiento que dio antes, disputando 36 partidos oficiales (4 goles), 31 de ellos de Liga y dos de la promoción ante el Elche, donde fue uno de los mejores jugadores zaragocistas. Sin embargo, la decisión sobre su salida estaba tomada ya desde hace tiempo, incluso en caso de que hubiera habido ascenso, por el aumento que tenía de ficha en Primera, y Baraja ha tenido claro desde el primer minuto de la pretemporada que no podía contar con el japonés, que se siente muy querido, eso sí, por la afición zaragocista.

La Liga para el Zaragoza comienza el próximo fin de semana ante Las Palmas y Kagawa podría no ser inscrito. O él o Raí, ya que la llegada del Toro Fernández hace que sobre una plaza de extracomunitario. La realidad es que el club no quiere que continúen ni el japonés ni el brasileño y la próxima semana es clave para el futuro de ambos, sobre todo de Kagawa, que no ha participado en los dos amistosos que se han disputado, ante el Getafe y el Nástic y tampoco lo hará mañana ante el Girona, salvo giro radical, porque la consigna del club es que no juegue en esas citas de preparación porque va a salir seguro. En el caso de Raí, su lesión, un esguince de rodilla en el 'playoff' de ascenso con el Ibiza ha retrasado su entrada en el grupo y ahora ha empezado a hacer parte del trabajo con el equipo. Aún así, la salida del delantero, al que no se le han dado oportunidades desde que firmó contrato con el primer equipo en abril del 2017, es más que factible, en principio también rescindido, con el Córdoba interesado en él, igual que el Celta y el Valladolid, en estos casos para sus filiales.