Cartagena es la enésima oportunidad para un Zaragoza que ha hecho de cada desplazamiento una amargura. Hace mucho tiempo que cada viaje supone un fracaso para un equipo aragonés que es, de lejos, el peor visitante de España tras acumular un empate y ocho derrotas en los nueve desplazamientos acumulados esta temporada. Al menos, aquella igualada en Alcorcón (0-0) se transformó en un triunfo en los despachos (0-3) por alineación indebida de los alfareros. Sin aquel accidente, el Zaragoza compartiría ahora con el Albacete el farolillo rojo de la tabla clasificatoria.
La indecente trayectoria del equipo cuando sale de casa se suma a los últimos encuentros de la pasada campaña, en los que tampoco fue capaz de ganar. Así, el Zaragoza no conoce el triunfo fuera de casa desde el 23 de junio del año pasado, cuando derrotó al Extremadura (1-2) en Almendralejo. Desde entonces, apenas tres empates en 13 encuentros, es decir, tres puntos sobre 39. Ruina. Solo Las Palmas acumula más tiempo sin alzar los brazos lejos de su feudo, ya que el equipo de Mel no gana desde el 17 de junio cuando se impuso al Almería (0-1). Canarios y aragoneses son los únicos equipos de la categoría que aún no han ganado fuera de casa en el campo. En Primera tampoco lo ha hecho el Huesca, aunque el cuadro azulgrana acumula menos tiempo sin hacerlo, ya que se impuso al Sporting en el último encuentro de la pasada campaña, disputado el 20 de julio.
El Zaragoza, pues, es el peor visitante de Primera y Segunda, tras contar casi todas sus salidas por derrotas. También es el peor en la faceta ofensiva, con un solo gol marcado en esas nueve batallas. Además, el único que hizo (de Narváez en Ponferrada) no sirvió para nada ya que el Zaragoza perdió (2-1).
El duelo ante el Cartagena supone el primero de una serie de envites en los que la escuadra aragonesa deberá enfrentarse cara a cara con esos demonios que le persiguen cuando coge la maleta, ya que siete de los nueve próximos partidos se jugarán lejos de La Romareda, incluido el de Copa ante el Alcorcón.
