-¿Cómo explica la transformación del Huesca que ilusionó en las dos primeras jornadas al que lleva ahora seis jornadas sin ganar?

-Es una cuestión de resultados. No estamos sacando puntos. La sensación del inicio fue muy positiva. La victoria en Eibar y el empate en San Mamés nos puso en una posición que nos ilusionó a todos, pero luego no conseguimos mantener ese ritmo de resultados y en el fútbol es lo que manda. Nos hemos encontrado con la realidad de una categoría que es muy exigente, donde ningún partido es fácil y no hemos conseguido sacar más puntos, sobre todo en nuestro campo, pese a que hemos competido.

-Desde la perspectiva actual es fácil decir que la apuesta por Leo Franco ha sido fallida, que le faltaba experiencia para ocupar este cargo. ¿Comparte esa opinión?

-Creo que fue una buena apuesta y tenía lógica. Leo Franco es una persona que conocía el club desde dentro y que tiene muchísima experiencia y conocía muy bien la Liga después de pasar por el Atlético de Madrid, el Mallorca... No creo que fuera un riesgo darle la oportunidad de poder dirigir al equipo en Primera División. Si no ha podido seguir en el Huesca es porque no se han dado los resultados, pero espero que pueda continuar su carrera como entrenador y tenga éxito.

-¿Ha podido hablar con él tras su cese?

-No, no he hablado personalmente con él. Sí que vino a despedirse de toda la plantilla.

-Dos meses sin ganar es demasiado. ¿Cree que el entrenador era el principal culpable de la racha negativa que atraviesa el equipo o que la plantilla también tiene parte de responsabilidad?

-No creo que haya que buscar culpables de la situación en la que nos encontramos. Hay que trabajar para reconducir la situación, estar unidos y afrontar el partido ante el Espanyol del próximo domingo. La Primera División es complicada y no hemos conseguido los resultados, pero considero que hemos competido siempre, salvo la primera parte del Atlético de Madrid.

-Las constantes variantes tácticas y de alineaciones denotan que Leo Franco intentó cambiar el rumbo, sin conseguirlo. ¿Cómo eran percibidos estos movimientos desde el vestuario?

-Yo conozco a Leo desde que llegué. Fuimos compañeros de equipo en mi primer año en Huesca. Sé que es una persona que conoce bien el fútbol y pese a no tener experiencia, intentó cambiar para mejorar, pero no llegaron los resultados que esperábamos.

-Su presencia era reclamada por la grada. Es el paradigma de los cambios constantes del entrenador. De no jugar nada usted pasó a ser referente. ¿Cómo vivió esta circunstancia?

-Al principio empezamos jugando con sólo dos jugadores en el centro del campo y por eso había menos oportunidades. Cuando se cambió el sistema y se colocaron a tres en esta línea es cuando pude entrar después del partido del Wanda Metropolitano. Son situaciones del fútbol. Siempre hay que trabajar al máximo para estar preparado cuando el entrenador te requiere.

-¿Qué puede decir de la entrada de Francisco? ¿Cuál es el cambio más significativo?

-Es lo que más se está notando. A Francisco le gusta estar más encima en los entrenamientos. Es intenso, pero creo que las circunstancias de esta semana no han ayudado para que podamos trabajar tácticamente. Entre las bajas por lesiones y los compañeros que están con sus selecciones casi no hemos podido desarrollar las ideas que tiene para el equipo. Necesitaremos más tiempo para ir afinando el Huesca que él quiere.

-Se empieza a hablar de posibles cambios y fichajes en la plantilla. ¿Cree que con lo que hay es suficiente para conseguir la permanencia o se debe añadir algún nuevo elemento?

-A este nivel hay que contar con plantillas largas porque la Liga es muy exigente y te castigan mucho las lesiones y las ausencias. Creo que somos un equipo que se ha visto afectado por estas circunstancias, con lesiones que nos han afectado.

-¿Qué le diría a aquellos aficionados que ahora pueden sentir cierta desilusión con la marcha actual del equipo?

-A la afición le pedimos que siga confiando en nosotros y que siga animándonos como lo ha hecho hasta ahora. Vamos a darlo todo para cambiar la situación y los resultados y queremos hacernos fuertes en El Alcoraz.

-El domingo llega el Espanyol de Rubi, el entrenador que les llevó a Primera División el año pasado. ¿Sera especial tenerle de nuevo en El Alcoraz?

-Va a ser un partido que afrontaremos con las ganas de conseguir la victoria. Estamos trabajando para ello. No va a ser fácil porque es un rival de entidad, como lo son todos en esta categoría, pero queremos conseguir la primera victoria en casa después de tres partidos sin lograrlo.