El Deportivo será la próxima piedra de toque para el Huesca en su imparable subida en la clasificación que le ha colocado en segunda posición tras las victorias ante Real Zaragoza y Las Palmas. El equipo viajó este sábado a Coruña y se medirá al conjunto coruñés a partir de las 17.00 horas con el fin de darle continuidad a su línea ascendente. Los gallegos han superado el aciago inicio liguero y ahora, pelean por alcanzar la cifra de los 50 puntos para consumar la salvación. Volverán al once tras las rotaciones Ager Aketxe y Emre Çolak, y Míchel no podrá contar con el lesionado Cheick Doukouré, a quien la plantilla quiere brindarle esta victoria que puede saber a ascenso.

La rotura del tendón de Aquiles del costamarfileño ha marcado la semana en el IES Pirámide. Nuevamente, Pedro Mosquera se quedará solo en el eje del mediocampo, secundado por Mikel Rico y Eugeni, a quiénes Míchel deberá dar descanso para oxigenar al equipo en las cinco jornadas que restan. Un paso más atrás, Pulido es un fijo y volverán Pedro López y Luisinho a los flancos de una defensa que lleva 180 minutos sin encajar. Más dudas hay en la parte de arriba donde Mir y Okazaki se reparten las titularidades, ambos rayando a un gran nivel y sosteniendo al conjunto altoaragonés en los momentos más complicados. Cualquiera de los dos podrá hacer pareja con el hombre asistencia del equipo. David Ferreiro, día tras día, está siendo el mejor azulgrana sobre el césped, y buena parte del crecimiento del Huesca está en sus botas.

Enfrente el histórico conjunto gallego en una de las peores temporadas de su historia reciente. Con 45 puntos, a uno de las posiciones de descenso, los gallegos sufren la urgencia de tener que sumar los puntos necesarios que le ayuden a firmar la salvación. Una plantilla que ha estado por debajo de sus posibilidades durante toda la campaña, algo que invita a pensar que podrían cambiar la dinámica en cualquier momento, de la mano de jugadores como Beauvue, Borja Valle o Víctor Mollejo. Sin duda, es uno de los desplazamientos más complicados que le quedan al conjunto azulgrana.

Con todo ello, la motivación es total para el Huesca. De los equipos que están en la pelea por el ascenso directo, el conjunto altoaragonés es quién muestra mayores visos de estabilidad y continuidad en su juego. Tras un período de adaptación tras el parón competitivo, los azulgranas llevan el peso de los partidos desarmando a sus rivales en los últimos minutos. Míchel prepara el ascenso a Primera.

MÍCHEL, PREPARADO // El entrenador del Huesca, Míchel Sánchez, se mostró cauto con su rival de este domingo. «Ha demostrado después del arranque que es ese equipo de un nivel muy alto en la categoría. Es un equipo grande, pero nosotros vamos con nuestra humildad, ganas e ilusión para ganar el partido», valoró el técnico.

El equipo se ha adaptado a las condiciones exigentes de la Liga y muestra ahora su mejor versión. «Estamos compitiendo muy bien, sabiendo llevar la presión, creemos que somos más fuertes, sobre todo en la actitud de los jugadores y su compromiso. Se ve un equipo unido, con un rendimiento muy alto, y salga el que salga, todos jugamos a lo mismo», apuntó el madrileño.

El preparador está muy cerca del objetivo con el que comenzó la temporada. «Cada vez queda menos y el margen de error es mínimo ya. El equipo que mejor gestione estas cinco jornadas puede ser el que consiga el objetivo final», concluyó.