Triste se marchó el técnico Francisco del estadio de Butarque tras la mala segunda parte del equipo oscense. «Veníamos con la intención de sacar tres puntos y hacer un buen partido pero no nos ha dado. Hemos tirado setenta minutos por la borda en los últimos veinte. Esa es la realidad y el que no se quiera dar cuenta es porque no está en este barco. Seguiremos nuestro rumbo y conseguiremos los tres puntos la jornada que viene. Ese es nuestro objetivo».

El arreón blanquiazul de la segunda mitad obligó al técnico almeriense a mover el banquillo con la intención de decantar el choque a su favor como sucedió la semana pasada contra el Betis. «Habíamos apostado por llegar con el partido vivo hasta el minuto 70 pero los cambios, como quizás no los teníamos planificados, no han conseguido aportar lo que queríamos. Este factor nos ha penalizado muchísimo y hemos merecido la derrota en esta segunda parte», admitió el técnico oscense. La situación clasificatoria del Huesca, colista con 11 puntos, obliga al equipo a realizar una gran segunda vuelta para poder salir de los puestos de descenso. Francisco cree que puede revertir la situación y quiso descartar los cálculos de puntos necesarios para la salvación centrándose únicamente en el próximo duelo contra el Atlético Madrid. «Sí, lo veo posible. Pero más que veintinueve puntos en la segunda vuelta me hacen falta los próximos tres. Es a lo que veníamos hoy aquí y en los últimos veinte minutos el equipo no ha dado la talla ni el nivel para sumar puntos. Cuando a alguno de los que estamos dentro le falta algo lo acusamos muchísimo. Nos toca levantarnos y sumar tres puntos la semana que viene».

Los rumores de la posible llegada de un portero fueron silenciados por la gran actuación de Santamaría. «Si está jugando es porque se lo merece. No voy a individualizar porque el equipo está colista y no creo que nadie se merezca ahora mismo nada, que nadie sea puesto por delante de nadie. Ha hecho un buen partido hoy, buenas intervenciones, y tiene toda mi confianza. Por eso está jugando», concluyó Francisco sobre el meta navarro.