Pedro Mosquera se suma al nuevo proyecto del Huesca. El gallego se convirtió ayer en el séptimo fichaje del club oscense y llega para aportar su experiencia en el centro del campo. Mosquera se desvinculó el jueves del Deportivo de la Coruña tras una etapa que ha durado cuatro temporadas y ha firmado un contrato para las dos próximas temporadas con el club de la capital altoaragonesa. El canterano del Real Madrid, que ha pasado también por las filas del Elche y del Getafe, no jugará el partido de esta tarde ante el Castellón pero se pondrá a las ordénes de Míchel a partir de la próxima semana. Mosquera completa una medular a la que han llegado también Mikel Rico, Eugeni Valderrama, Juan Carlos Real y a la que también podría llegar Nwakali en las próximas horas. Esta acumulación de jugadores en la zona de creación podría abrirle las puertas de salida a Damián Musto, el cual no ha tenido el rendimiento que se esperaba desde que llegó a Huesca y continúa pendiente de una sanción por dopaje.

Mosquera, de 31 años, puede actuar tanto de pivote en solitario como en posiciones más adelantadas y puede ser un comodín para Míchel en sus diversas variantes tácticas del 4-14-1 o del 4-3-3. El gallego cuenta con una dilatada experiencia en Primera División, donde ha disputado un total de 150 partidos en los que ha marcado cuatro goles. En su última temporada en La Coruña, Mosquera solamente disputó 16 partidos y no logró instalarse en el once titular ni de Natxo González ni de Martí.

el retorno de rico / Mikel Rico fue el encargado de pasar por zona mixta tras la sesión matinal de ayer. «Para mí es volver a empezar. Después de seis años en el Athletic es un cambio importante pero me estoy adaptando bien», comentó el centrocampista acerca de su adaptación al Huesca después de tanto tiempo. Cuando faltan dos semanas para que el Huesca se estrene en Liga ante Las Palmas, Rico solamente tiene elogios hacia sus compañeros. «Hay gente con mucha calidad y, sobre todo, comprometida. Es un equipo con alma, que se entrega, y eso es lo más importante», analizó Rico.

El Huesca está en pleno proceso de adaptación al estilo de juego que le agrada a Míchel. «Siempre intento captar bien lo que quiere cada entrenador para dar el máximo posible. Ahora, cada día es una prueba de nivel, tienes que demostrar lo que puedes dar», destacó el mediocentro.

Al igual que otros compañeros de equipo, el vasco no quiso mostrar preocupación por la falta de refuerzos. «Faltan jugadores pero desde el club están trabajando de la mejor manera posible. Eso es algo que no está dentro de nuestra competencia, nosotros tenemos que entrenar al máximo y estar lo mejor posible», concluyó Mikel Rico.