El Huesca está interesado en Martín Mantovani para reforzar el puesto de central tras la lesión de larga duración de Pablo Insua, que se rompió en Montilivi ante el Girona el ligamento cruzado anterior. Desde entonces los altoaragoneses se encontraban en la búsqueda de un recambio para el gallego y el más cercano es el argentino.

Mantovani es un zaguero experimentado. Tiene 34 años y pertenece a Las Palmas, entidad a la que llegó libre en verano tras acabar su ciclo en el Leganés. Al equipo pepinero llegó en el 2013 tras haber jugado en el Real Oviedo y anteriormente en el Atlético de Madrid B, Cultural Leonesa y Atlético Baleares. En Butarque logró el ascenso a Segunda y también a Primera.

En la máxima categoría permaneció dos temporadas en las que disputó 45 partidos de Liga y seis de Copa del Rey entre ambos cursos. Tuvo más protagonismo en su primer año en la élite, ya que fue partícipe en 31 encuentros de la competición doméstica y contribuyó a la salvación. El pasado curso jugó menos y acabó marchándose en verano.

Con Las Palmas lleva una temporada irregular hasta el momento. Manolo Jiménez empezó confiando en él, pero después desapareció de las alineaciones. La llegada de Paco Herrera le hizo volver a la titularidad y ha sido un fijo para el preparador catalán hasta que fue destituido. Sin embargo, en el estreno de Pepe Mel, que fue con victoria en Riazor este fin de semana ante el Deportivo (0-1), el argentino se quedó fuera de la convocatoria.

Al Huesca le apremia el tiempo para firmar a un central, ya que el permiso por la baja de larga duración de Pablo Insua se acaba próximamente y se encuentra escaso de efectivos en el centro de la zaga. De hecho, Francisco solamente tiene en nómina a tres centrales y juega con una línea de cinco atrás, por lo que cualquier lesión o sanción afecta negativamente al planteamiento de los partidos.

Fue algo que sucedió en el último duelo ante el Getafe por la baja de Pulido. El toledano vio ante el Sevilla su quinta tarjeta amarilla y no pudo estar contra los madrileños. Para el siguiente duelo ante el Alavés, Adrián Diéguez no tiene la cláusula del miedo y podrá jugar. Además vuelve Pulido, aunque Etxeita suma nueve tarjetas amarillas y está en peligro de ser sancionado. Para el tramo decisivo de la campaña Francisco necesita de efectivos en todas las líneas para acometer con más garantías el reto de la salvación, que tras esta jornada se ha quedado a cuatro puntos.