La calma después de una semana de infortunios llegó ayer a la capital oscense. Poniendo nuevamente lo deportivo en primera plana, Míchel Sánchez fue presentado ayer en el estadio de El Alcoraz como el nuevo entrenador del Huesca para la próxima temporada en Segunda División. «Desde el primer momento demostraron una gran confianza. Tomamos esta experiencia con una ilusión tremenda y con un compromiso especial porque sabemos que vamos a tener todos los medios para hacer un gran año», declaró el madrileño, de 43 años, en su presentación.

Míchel llega a Huesca junto a su segundo entrenador, Salvador Fúnez, y el preparador físico, David Porcel, que le acompañaron también en su etapa esta temporada en el Rayo Vallecano. Dentro de su cuerpo técnico también se encontrarán Adrián Sipán y Adrián Mallén. La firma del acuerdo entre Míchel y la entidad oscense fue rápida pero la oficialización del acuerdo se demoró durante más de una semana tras la operación Oikos, que desencadenó la dimisión del presidente del Huesca, Agustín Lasaosa.

«La semana anterior a mi oficialización definitiva ya estaba todo acordado tras una reunión en Madrid con Petón. Nunca he dudado en mi decisión porque sabía que el Huesca no tenía que ver con esto. El tema deportivo está por encima de todo y me parece un proyecto espectacular», aclaró el nuevo entrenador azulgrana. A pesar del descenso a Segunda, el madrileño afirmó que el Huesca es un club en «pleno crecimiento» y que ha adquirido «experiencia». «El club está creciendo como yo y juntos de la mano vamos a poder hacer grandes cosas durante esta temporada, que espero sea la primera de muchas», apuntó Míchel, que ha firmado un contrato por un año con la entidad oscense pero que se tildó de «continuista» si está «a gusto en un sitio».

Esta será la primera experiencia de Míchel fuera del Rayo Vallecano, con el que consiguió un ascenso a Primera División hace dos temporadas y del que fue despedido este año tras los malos resultados en la élite. «El año del Huesca también ha sido difícil pero he visto esa gran unión que había dentro del club y esa es una de las cosas por las que he decidido venir aquí, vemos que todo el mundo rema en la misma dirección», aclaró.

Una forma de juego que ha sido una de las claves para que el club oscense haya optado por el madrileño para su banquillo. «Lo que nos ha traído hasta aquí es una manera de hacer las cosas. Cada rival te pone las cosas muy complicadas porque la igualdad es máxima y tenemos que estar preparados en todos los frentes. Nuestra intención es que el equipo sea protagonista y que busque la portería contraria defendiendo con la línea adelantada», explicó el técnico acerca de la implantación de su filosofía de juego en la plantilla oscense.

Además, Míchel se quiso quitar la presión acerca de los objetivos del club de cara a la próxima temporada. «La idea es ser lo más competitivos posible. Vamos a ponernos ya manos a la obra para hacer un Huesca más grande. El objetivo es que la gente siga enganchada y venga a El Alcoraz a disfrutar. Después, cada jornada marcará hasta dónde podemos llegar. La categoría es muy difícil y te pone en su sitio, pero tenemos la confianza de hacer una buena temporada», concluyó el preparador madrileño.