Pacheta es el elegido por la Sociedad Deportiva Huesca para dirigir al equipo altoaragonés con el objetivo bien claro: conseguir la permanencia en Primera División, una tarea ardua y complicada. El burgalés, que firma hasta el final de la presente campaña, era uno de los técnicos disponibles en el mercado con más prestigio y caché pese a que solo ha dirigido 15 encuentros en la élite, al Numancia en la 08-09. Le acompañarán Chema Monzón como segundo entrenador y Jorge Trigueros como preparador físico.

A pesar de que después del partido contra el Betis y una buena parte de la jornada de ayer el mejor colocado era Asier Garitano, cuya última experiencia fue con el Deportivo Alavés, finalmente diferencias en la duración del contrato propiciaron que el Huesca activase otras opciones y el elegido para tratar de neutralizar el déficit de seis puntos con respecto a la salvación ha sido Pacheta.

El técnico cogió al Numancia al final de la 08-09 en Primera tras la destitución de Kresic, pero no pudo evitar el descenso. Su primera gran experiencia llegó en el Real Oviedo, equipo al que le cambió la cara desde el primer momento. Pasó de luchar por no bajar a llegar a puestos de Copa del Rey y al curso siguiente se quedó a las puertas del playoff. Después firmó, también en Segunda B, con el Cartagena, el Korona Kielce polaco, el Hércules y el Ratchaburi tailandés, pero su gran momento vino de la mano del Elche.

En el cuadro ilicitano ha pasado al plano estelar después de hacerse cargo del equipo en Segunda B, llevarlo a la categoría de plata, asentarlo en un año y, al siguiente, ascenderlo a Primera División. Pero más allá de los resultados, que por supuesto tienen su gran valor, Pacheta consiguió en el Elche maximizar una plantilla en principio no construida para subir, hacer uno de los juegos con más identidad de Segunda y ser un conjunto muy ordenado y pragmático.

Además, el burgalés es un motivador nato, un técnico con las ideas muy claras. Logra que su mensaje cale, que los futbolistas crean en la victoria y, a diferencia de entrenadores con otra percepción del fútbol, Pacheta suele adaptarse a sus equipos en lugar de ser los jugadores los que se moldeen a lo que quiere el entrenador. El Elche, pese al ascenso, quiso hacer un giro de timón y le dio el banquillo a Jorge Almirón y el preparador castellano decidió darse un tiempo para elegir su próximo reto con tranquilidad, Y finalmente es el del Huesca.