Necesita el Huesca espantar muchos fantasmas en su visita a Alcorcón de este domingo (16.00 horas, Movistar LaLiga3) para salir victorioso y conseguir los tres puntos a domicilio que tanto se están resistiendo. Por si su bajón de juego y resultados lejos de El Alcoraz no fuera ya un reto suficiente a solventar para los azulgranas, esta semana ha venido cargada de nuevo de noticias extradeportivas y muy desagradable con un nuevo capítulo de la operación Oikos que salpicó con dureza.

Así está el Huesca, teniendo que sobreponerse a un caso con nombre griego cuya traducción es casa y a sus grandes problemas fuera de casa. Curioso. Dijo Míchel la semana pasada tras vencer a la Ponferradina que Alcorcón es una buena oportunidad para demostrar que su equipo no tiene dos caras, la de local y la de visitante.

Fuera se muestra débil, dócil, flojo en defensa y poco determinante en ataque. Le cuesta dominar y ser dominante y se destapa la cara menos vertical. Es un problema que está arraigado, un bache que cada vez es más profundo. Hubo dos victorias fuera, pero sin brillo. Ese es el paso que le queda por dar, lograr un triunfo y que sea convincente, como si se jugara el partido en El Alcoraz.

Y en cuanto a la operación Oikos, aunque en el seno del Huesca han intentado abstraerse y centrarse solamente en el plano deportivo, habrá que ver si finalmente afecta o no. Ha sido una semana complicada y, a diferencia de la primera vez en la que hubo detenciones, ahora sí que hay competición oficial. Ahí tiene una prueba mental el conjunto altoaragonés.

En el plano deportivo, Míchel se ha llevado a Alcorcón a 18 futbolistas y se han quedado en casa Insua, Doukouré, Pedro López, Seoane, Joaquín Muñoz e Ivi López. Es decir, que vuelve a una citación Raba tras haberse perdido el duelo ante la Ponferradina.

Además de las propias dudas de las piezas, la principal incógnita residirá en comprobar si el técnico madrileño da rienda suelta y continuidad al sistema que empleó en el último partido, un 4-3-1-2 diferente al 4-3-3 que vino suando durante toda la temporada. Si bien el resultado final fue positivo, fue el choque como local en el que más incómodo se sintió el Huesca. De todos modos, con un sistema u otro, no se esperan grandes cambios, si bien podría entrar Dani Raba.

Por su parte, el Alcorcón se encuentra rozando los puestos de playoff y en línea ascendente. Se está mostrando sólido de la mano de Fran Fernández, que no podrá contar con el exazulgrana Diéguez por sanción y, además, tiene la duda del también exoscense Dani Jiménez.