El Huesca afronta su tercer duelo en ocho días este domingo (18.15 horas) ante el Real Oviedo en el Carlos Tartiere. Tras la victoria ante el Tenerife (2-1), el equipo visita el campo de un rival correoso, que a lo largo de los 90 minutos no le pondrá las cosas fáciles. «Otro rival de máxima dificultad pero queremos dar esa vuelta de tuerca fuera de casa, ser un equipo que empieza a ganar fuera y ser igual de fiable que en casa. Daremos un golpe encima de la mesa si vencemos este encuentro», avisó, el entrenador del Huesca, Míchel Sánchez.
El cuadro azulgrana tiene la asignatura pendiente de mostrar la misma cara tanto en casa como cuando disputa sus partidos a domicilio y el entrenador no quiere dejar pasar más oportunidades, «nos reforzaría mucho ganar fuera de casa, si lo conseguimos el equipo va a respirar y dar un paso hacia adelante pero no quiero que se convierta en algo obsesivo», aseguró el técnico, que confía en ver la mejor imagen de su plantilla, «Hemos hecho partidos fuera, hemos dominado y no nos hemos llevado la victoria. Otros en casa, no hemos dominado y hemos ganado, así es el fútbol. Lo que sí es cierto es que ha habido pocos partidos en los que no hemos sido competitivos», confirmó el madrileño.
Uno de los que viajará a Oviedo será el flamante fichaje para la delantera del Alto Aragón. Rafa Mir estará a disposición del entrenador, sí así lo requiere, para paliar la falta de gol que asola al equipo durante toda esta primera vuelta. «Es un delantero diferente a lo que tenemos. Tiene potencia para atacar los espacios, tiene remate, se puede complementar con otro punta… Nos va a dar mucho porque quiero que esta plantilla sea lo más competitiva posible», afirmó Míchel acerca del grupo, que esta semana perdió a Ivi López en busca de más minutos. La sobrecarga de partidos en este mes de enero no distrae al preparador, que tiene los cinco sentidos puestos en el domingo. Ve a todos sus hombres preparados y con ganas después de unos días de preparación y estudio del rival. «Tengo la sensación de que la gente va a llegar bien al domingo. Después analizaremos bien lo que queremos hacer y como hacerle daño al Oviedo», asintió el técnico confiado.
El equipo asturiano viene de perder ante el Almería (2-0) en un encuentro no ausente de polémica por la actuación arbitral. «Queremos que el criterio se unifique de una vez por todas y qué sepamos a que atenernos. El asunto de las manos es lo más conflictivo porque muchas veces da lugar a la duda. Las jugadas de penalti se dice que predomina el juicio del árbitro pero el que prevalece es el del VAR y debe intervenir. La labor arbitral se vería mejorada con la sensación de respaldo del videoarbitraje», lamentó el líder del vestuario oscense.
Una vez más, un partido de máxima igualdad y exigencia, en una categoría en la que cada punto es oro y cada minuto es importante. El Huesca quiere ser protagonista en todos los campos y plantar cara jornada tras jornada. «No tenemos la sensación de ser el equipo a batir en la categoría pero sí tenemos nuestras armas para contrarrestar a cualquier adversario. Cuando el rival es el que tiene el balón hay un plan B y es importante saber sufrir, como lo hicimos el otro día. Es muy difícil conseguir una victoria pero somos un equipo con una exigencia alta y queremos sumar de tres en tres», sentenció el entrenador madrileño acerca de la ambición del equipo.
