El entrenador del Sevilla, Pablo Machín, utilizó ayer a tres jugadores del filial para completar la sesión de trabajo de la plantilla, mermada de futbolistas sobre todo en la zona defensiva para afrontar el partido del próximo sábado en el campo del Huesca.

El preparador soriano dirigió el entrenamiento en la Ciudad Deportiva con la presencia de tres jugadores del Sevilla Atlético -Genaro, Amo y Berrocal-.

El equipo acumula muchos jugadores de la zona defensiva con diversas dolencias físicas, como los dos centrales que salieron lesionados el sábado ante el Barcelona, el austríaco Wöber y el argentino Mercado.

Están algo mermados otros dos centrales, el danés Simon Kjaer y el portugués Daniel Carriço, mientras que el francés Joris Gnagnon, también defensa central, apura su recuperación, al igual que el lateral Escudero.