Borja sigue creciendo con el viento a favor. Su situación estratégica y las condiciones atmosféricas que se dan en su término municipal hacen que se haya convertido en un enclave con un enorme potencial eólico. La instalación a lo largo del 2020 de 21 molinos en sus tres últimos parques -El Pradillo, Puylobo y San Francisco de Borja- alcanza los 172 megavatios de potencia instalada.

"Ésta es una de las zonas con mayor potencial de viento, no solo en cuanto a intensidad sino también de continuidad en el tiempo. Son muchos los días del año en los que hace viento", indica el alcalde de Borja, Eduardo Arilla. La zona a la que se refiere el primer edil se extiende entre el paraje natural de La Estanca, en el corazón de la Comarca Campo de Borja, y el límite con Navarra.

La fuerza con la que el viento se deja notar en Borja se traduce directamente en una fuerte inyección económica para las arcas municipales. En cifras, el ayuntamiento ingresará en los próximos 30 años "más de un millón de euros cada año en concepto de impuestos, tasas y canon", reconoce Arilla, si bien los tres últimos parques instalados van a estar exentos del impuesto de actividades económicas (IAE) en estos dos primeros años.

Durante la presente legislatura, que se extenderá hasta el año 2023, el consistorio destinará dichos ingresos anuales no solo a mejoras en edificios, equipamientos y servicios municipales, sino también a una ambiciosa programación de actividades culturales, deportivas y festivas para que puedan disfrutarlas sus más de 5.000 habitantes.

Además de los ingresos anuales, la licencia de obras supuso "una inversión extra próxima a los dos millones de euros", reconoce Arilla. También Iberdrola, empresa propietaria del parque Puylobo, destina cada año 21.300 euros a llevar a la práctica el plan de mejora de caminos rurales de la localidad.

Así se dibuja un paisaje dominado por aerogeneradores situados, en su mayoría, en monte de utilidad pública junto a otros en parcelas agrícolas municipales y particulares. Pero no solo la eólica reporta beneficios en Borja. El consistorio va a destinar 353.357 euros para la instalación de placas fotovoltaicas en equipamientos públicos (colegio, pabellón, piscinas...), lo que supondrá un ahorro de 128.000 euros cada año.