Las serias advertencias como Fumar mata o Fumar provoca cáncer mortal de pulmón que desde hace un año llevan inscritas las cajetillas de tabaco en España son ineficaces. Así lo aprecian el 52% de los 10.000 médicos de familia que han participado en un sondeo sobre el abordaje del tabaquismo. La investigación revela que estos mensajes agresivos incluso provocan el efecto contrario en un 40% de los adolescentes y, por tanto, una mayor atracción y consumo.
Según los expertos de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC), que ha realizado la investigación, la información presentada de manera contundente no logra que los fumadores tomen conciencia de los verdaderos riesgos para la salud. "En los adolescentes, el mensaje antitabaco debe ser claro y su transmisión debe implicar a padres, tutores, docentes y a médicos de familia", advirtió Francisco Camarelles, coordinador del área de tabaquismo.
HABITO ADOLESCENTE Para Luis Aguilera, presidente de la SEMFYC, los jóvenes no perciben que fumar es nocivo porque gozan de salud. "Un mensaje agresivo les incita a la transgresión. Sólo hacen caso cuando consideran que se les respeta y no se les impone nada. El paternalismo es un error", destacó Aguilera.
Para Asensio López, vicepresidente de la SEMFYC, los adolescentes ven el tabaco como algo positivo porque está en relación con su participación dentro del grupo y su capacidad para realizar actividades que les hagan sentirse más adultos. "Hay que hacer el mayor esfuerzo en la prevención. Una vez que fuman 10 cigarrillos al día es difícil que lo dejen salvo que el grupo decida que es un mal rollo", sostuvo López.
PERMISIVIDAD Julia González Alonso, subdirectora general de Salud Pública, subrayó que insertar mensajes de advertencia en las cajetillas no fue una iniciativa tomada unilateralmente por el Ministerio de Sanidad, sino que surgió de una directiva comunitaria "muy meditada" y de obligado cumplimiento. "Estos mensajes cumplen su misión. Puede que no lleguen especialmente bien a los fumadores, pero favorecen un clima de debate social, imprescindible para lograr una mayor concienciación", defendió González.
El 95% de los médicos de atención primaria creen que existe un ambiente social favorable al tabaco. Esta situación, según Asensio López, se traduce en una excesiva tolerancia de la población con los fumadores y en la comercialización y publicidad por parte de las autoridades.
"Al contrario que en la mayoría de la UE, se considera que fumar es lo normal y de buena educación aguantar que te echen el humo. Hay que invertir el clima para que sea más fácil no fumar que hacerlo, como ocurre ahora", pidió López.
Los médicos de familia también abogan en la encuesta por la creación de un número cada vez mayor de espacios sin humo en lugares públicos y el trabajo. Un 70% lo cree fundamental. El Plan Nacional de Prevención del Tabaquismo, aprobado en el 2003, prevé que el 50% de las empresas disponga de estos espacios a finales del 2005 y todas ellas en el 2007. "Estamos trabajando con empresarios y sindicatos. No es un tema de abordaje sencillo", dio largas Julia González, que eludió concretar el grado de cumplimiento.
La SEMFYC ha concedido este año su Premio Sin Humo al cantante Joan Manuel Serrat por considerarle una personalidad pública con capacidad para influir contra el hábito de fumar, ya que ha sufrido en sus propias carnes los efectos nocivos del tabaco.
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