Los expertos en drogodependencias advirtieron ayer que un 60% de los 30.000 españoles que llevan más de tres años esnifando cocaína desarrollan psicosis paranoides de hasta 15 minutos. Lo más preocupante del caso es que un 10% de ellos (unos 2.000) presentan cuadros muy graves que comportan alteraciones del pensamiento y la percepción de la realidad, que pueden prolongarse hasta 72 horas.

"Estos procesos graves, aunque transitorios, se reproducen con los consumos y pueden poner en peligro su integridad física y la de los demás", explicó el presidente de la Sociedad Española de Toxicomanías (SET), José Pérez de los Cobos, en el transcurso de un debate sobre los problemas terapéuticos y legales de estos pacientes celebrado en el Plan Nacional sobre Drogas.

IDEAS DELIRANTES Según el psiquiatra Luis Caballero, la psicosis cocaínica se caracteriza por provocar ideas delirantes persecutorias que impulsan a quien las padece a la agresividad, con ansiedad y estereotipias compulsivas.

Psiquiatras y fiscales abogaron por la reforma del Código Penal para que, como medida cautelar, se imponga un tratamiento ambulatorio, con serios controles médicos, a pacientes que han delinquido hasta que se garantice su rehabilitación.

Los expertos también proponen que el consumo deje de ser un atenuante cuando se perpetra un delito. "Su inimputabilidad penal es un cheque en blanco para que lo puedan volver a repetir. Ya se conocen varios casos", denunció Teresa Comte, fiscal coordinadora del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.