El informe del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, órgano que pertence al Consejo General del Poder Judicial, confirma que el 74% de las sentencias por feminicidio en 2016 no había denuncia previa de la víctima a pesar de que «con toda probabilidad había malos tratos y fueron ocultados».

Los expertos del Observatorio han analizado 38 sentencias de crímenes por violencia de género, 10 sentencias de casos de muertes por violencia doméstica y 5 sentencias en procesos por asesinato de menores a manos de sus progenitores.

El informe señala que es preciso fomentar la información a todos los agentes implicados en ayuntamientos, comunidades autónomas y organismos centrales para que las víctimas conozcan sus derechos y los recursos a su disposición. También se incide en la necesidad de mejorar los canales de detección de riesgo en mujeres que acuden a centros sociales para recabar ayudas y no desean denunciar, y en hacer hincapié en los programas de información, prevención y mecanismos de protección a niños y adolescentes.

La media de edad de las víctimas de feminicidio es de 40 años, incrementándose respecto al 2015 (32 años). Ninguna de las víctimas era menor de edad y la más joven tenía 20 años.

El grupo de expertos aboga también por reforzar programas de información y sensibilización en los centros educativos con el objetivo de mejorar la prevención y protección de los jóvenes. Asimismo considera necesario fortalecer el apoyo a personas mayores en situación de dependencia porque cada año se registran feminicidios de mujeres mayores a cargo de sus parejas varonas.

El agravante de parentesco fue el más aplicado. También han sido aplicados los agravantes de abuso de superioridad, reincidencia, alevosía y ensañamiento.

En cuanto a las circunstancias atenuantes, el trastorno o afectación mental fue apreciado en apenas un 10% de los casos, lo que demuestra la nula o reducida influencia de las disfunciones mentales en este tipo de crímenes. Mientras, solo en una de las sentencias dictadas en 2016 se apreció el atenuante por consumo de alcohol y drogas. El informe alerta del preocupante aumento del porcentaje de la entrega voluntaria del autor (40%) en caso de violencia machista.