La Agencia Europea del Medicamento (EMA) sigue analizando los datos disponibles sobre la seguridad de la vacuna contra el covid-19 de AstraZeneca y las circunstancias clínicas que rodean a los casos de trombos relacionados con el antígeno para determinar "si la vacuna pudo haber contribuido o si es probable que el evento se deba a otras causas", según ha informado el regulador europeo en un comunicado en el que avanza que el comité de seguridad de la EMA (PRAC) revisará a fondo la información disponible este martes y que esperan llegar a conclusiones en una reunión extraordinaria convocada este jueves 18 de marzo.

"La investigación de la EMA ha continuado durante el fin de semana, y en los próximos días se llevará a cabo un análisis riguroso de todos los datos relacionados con eventos tromboembólicos. Los expertos están analizando con gran detalle todos los datos disponibles y las circunstancias clínicas que rodean casos específicos para determinar si la vacuna pudo haber contribuido o si es probable que el evento se deba a otras causas", ha explicado la agencia que trabaja estrechamente con la farmacéutica anglosueca, expertos en trastornos sanguíneos y otras autoridades sanitarias, incluida la MHRA del Reino Unido, que ya ha administrado hasta ahora 11 millones de dosis administradas de la vacuna.

Política de precaución

La EMA también ha recordado que las decisiones adoptadas por una docena de países europeos de suspender temporalmente la administración de la vacuna se enmarcan en una política de precaución pero insisten en que el número de tromboembolias notificado no es mayor que el observado en la población general. "Los casos sobre coágulos de sangre, algunos con características inusuales como un bajo número de plaquetas, han ocurrido en un número muy pequeño de personas que recibieron la vacuna. Hay muchos miles de personas que desarrollan coágulos de sangre cada año en la UE por diferentes razones" pero "el número de eventos tromboembólicos en general en personas vacunadas no parece ser mayor que el observado en la población general", sostienen.

Es decir, "si bien la investigación está en curso, la EMA actualmente mantiene la opinión de que los beneficios de la vacuna AstraZeneca en la prevención del covid-19, con su riesgo asociado de hospitalización y muerte, superan los riesgos de efectos secundarios", señalan. El mismo mensaje que ha trasladado este lunes el responsable de la amenaza biológica y la estrategia de vacunas de la EMA, Marco Cavalieri, ante la comisión de medio ambiente y salud pública del Parlamento Europeo. Según ha explicado, no hay pruebas de que los casos de trombos notificados estén relacionados con esta vacuna. "Creemos que hasta ahora no hay evidencias de que haya un riesgo emergente. Creemos que los beneficios son mayores que los riesgos y no vemos ningún problema para continuar con la campaña de vacunación", ha indicado.