La Audiencia de Barcelona ha condenado a un hombre de Badalona a abandonar su casa y permanecer alejado a más de 300 metros de su esposa durante 6 meses, por insultarla y amenazarla de muerte repetidamente. El tribunal, que le ha impuesto cuatro fines de semana de arresto, consideró probado que el hombre llamó "guarras" a su hija y a su esposa y le advirtió a ésta que había llegado su hora.