La Dirección General de Emergencias y Seguridad Civil activó ayer el plan especial por contaminación de aguas marinas al detectarse en la costa del Garraf (Barcelona), a unas dos millas de los municipios de Sitges y Vilanova, varias manchas de residuos oleosos, al parecer un tipo de alquitrán o petróleo poco degradado. Se trata concretamente de unas seis manchas de diversas medidas que cubren de forma dispersa un área de unos 2 por 1,5 kilómetros, aunque la mayor tiene unas dimensiones considerables: 500 por 80 metros. También se recogieron algunas galletas de chapapote en playas cercanas, sobre todo en Sitges.

Fuentes de Emergencias y Seguridad Civil descartaron que el vertido tenga efectos sobre la salud pública u obligue a restringir la pesca. También consideraron que las afectaciones medioambientales "serán mínimas" más allá de las aves, una veintena en total, que se han recogido petroleadas en los últimos días. Tanto el Departamento como el Ministerio de Medio Ambiente consideraron que el vertido podría deberse a un achique de sentinas o limpieza de un petrolero.

LAS PISTAS Aunque un avión de rastreo localizó ayer por la mañana la gran mancha, las investigaciones se habían iniciado el pasado sábado, al recogerse las primeras aves petroleadas, algunas en puntos tan distantes como Lloret de Mar (Gerona) o la Barceloneta, en la ciudad de Barcelona, según explicó el director de Medio Natural de la Generalitat, Ramón Luque. La activación del plan de emergencia permitió dotar a la Administración de medios, recursos y materiales para actuar con contundencia.

RESPONSABILIDADES Las asociaciones ecologistas recordaron ayer que los hidrocarburos vertidos en el mar por culpa de accidentes no suponen ni el 10% del total, como subrayó Greenpeace. La mayoría proceden de la limpieza de sentinas en alta mar.