Ángel Boza, el miembro más joven de La manada, fue apartado del módulo 4 de la prisión de Pamplona en la que se encuentra interno por participar en una agresión grupal a un condenado por abusos sexuales, según El programa de Ana Rosa.

Boza cuenta con antecedentes por delitos de robo con fuerza y contra la seguridad vial, y es reincidente en la conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas, formó parte de la pelea junto a otros cuatro reclusos, aunque él niega los hechos.

Conocido por el resto del grupo como el aspirante, Boza aseguraba que necesitaba pasar ciertas pruebas para entrar a formar parte de La manada. Boza fue separado de sus amigos Ángel Prenda y Jesús Escudero, con quienes compartía módulo.

Boza, además, es el único que no formó parte de la presunta agresión sexual a otra joven en Pozoblanco, un caso más por el que el grupo tendrá que sentarse ante el juez.

Por otro lado, ayer se supo que debido al fallo de seguridad que permitió a los medios de comunicación acceder a los datos personales de la víctima de La manada, publicados en redes sociales, se ha desactivado temporalmente el acceso a las sentencias publicadas en la web del Gobierno de Navarra mediante código de verificación.

El fallo judicial enviado por correo electrónico a los medios de comunicación tenía los datos de la víctima borrados, pero se mantuvo en los márgenes del documento un «verificador» o secuencia de números que permitió acceder al original completo en la web del Gobierno Foral.

Además, según explicó a Efe la directora general de Justicia, Lourdes Aldave, el lunes se recibió un requerimiento del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), Joaquín Galve, en el que solicitaba que se desactivase el acceso a todas las sentencias mediante código ante la «alarma» social generada por la filtración de datos y para que no vuelva a ocurrir en el futuro.