Mide 90 centímetros de la cabeza a la cola. Sus orejas son anchas; sus bigotes, cortos; y sus dientes, muy afilados. Su pelaje es grisaceo y en su larga cola destacan unas anillas de un tono algo más oscuro. Así es el 'gato zorro', la nueva especie de felino descubierta en Córcega.

Los pastores de la zona llevan siglos hablando de este animal en sus relatos populares. Desde el 2008, los expertos han estado investigando la especie. Y ahora, tras más de una década, las autoridades francesas de la Oficina Nacional de Caza y Vida Silvestre (ONCFS) reconocen la especie y piden mayor protección.

Esta nueva especie salvaje habita en los bosques del municipio de Asco, situado en la zona francesa de la isla. En estos aislados parajes, los 'gatos zorros' vivirían lejos de la presencia del hombre. Hasta ahora, los investigadores han identificado a 16 ejemplares y analizado a 12 de estos, incluyendo una hembra.

ESTUDIO DEL GENOMA FELINO

"Estamos ante una especie natural salvaje que se conocía pero no se había registrado ya que se trata de un animal extremadamente discreto, con modales nocturnos. Este es un descubrimiento extraordinario", comenta entusiasmado Pierre Benedetti, el Técnico Ambiental de ONCFS, a la agencia AFP.

"El análisis de su ADN lo distingue del gato montés europeo (Felis silvestris silvestris) y, a la vez, lo sitúa cerca del gato africano de bosque (Felis silvestris lybica), aunque su identidad exacta aún está por determinarse", añade el investigador responsable del hallazgo.

Los expertos explican que, si tenemos en cuenta su reproducción y dieta, este gato podría haber llegado a la isla durante la 'segunda colonización humana', que se remonta a 6.500 años antes de nuestra era. La especie, además, podría tener su origen en el Oriente Medio.