David y Victoria Beckham no podrán volver a interpretar su papel favorito: el de la pareja perfecta. La eterna luna de miel, de la que tanto partido publicitario vienen sacando, ha quedado enterrada por un aluvión de detalles sobre la presunta aventura extra conyugal del futbolista y su bella ayudante personal Rebecca Loos, de 27 años.

La tórrida relación habría ocurrido entre los meses de septiembre y diciembre en Madrid, mientras Victoria se encontraba en Inglaterra, donde sigue residiendo habitualmente.

La prensa popular británica, que llevaba meses olfateando el escándalo, ha ofrecido como pruebas las declaraciones del hermano de Rebecca y del chófer del futbolista, confirmando el romance. "No tenía ni idea de que Beckham estaba engañando a Victoria con mi hermana. Mis padres tampoco sabían nada. Mi hermana va a ser etiquetada como una rompematrimonios. Su vida nunca volverá a ser la misma", declaró John Loos a The Sun. El periódico también recoge los comentarios del cubano Delfín Fernández, el chófer y guardaespaldas de Beckham, quien asegura haber visto a la pareja "besándose como adolescentes".

También fue Fernández quien, en cuatro ocasiones, los dejó a altas horas de la madrugada en el Hotel Santa Mauro, donde vivía el futbolista y en el Melia Fénix, donde se había reunido el Real Madrid antes de un partido. El jugador ha calificado las alegaciones de "ridículas" en un comunicado donde, sin embargo, no desmiente taxativamente el haber mantenido relaciones con Rebecca.

FOTOS COMPROMETIDAS Los rumores sobre el affaire comenzaron a circular el pasado mes de septiembre, cuando la joven, que había sido contratada como traductora y relaciones públicas de los Beckham, fue fotografiada una noche con el futbolista en el club madrileño Ananda. Las fotos desataron la furia de Victoria, quien habría telefoneado a la ayudante para decirle que ir a la discoteca con su marido no formaba parte del contrato laboral. Dos meses más tarde, la chica perdió el empleo y, según la prensa, desde Navidad no ha vuelto a verse con David, aunque ambos se han seguido enviando mensajes.

Algunos de estos explícitos mensajes, de alto contenido erótico, fueron publicados con grandes censuras por The News of The World el domingo pasado. Ese día, con el rostro lloroso, Victoria abandonó Londres camino de Suiza, acompañada de sus dos hijos. Ayer David voló desde Madrid para reunirse con su familia.

No serán precisamente unas vacaciones de placer. La crisis matrimonial se venía fraguando desde que fue fichado por el Real Madrid y Victoria se negó a instalarse en la capital española. Ella está tratando de reflotar una inexistente carrera como estrella del pop, algo que, al parecer no puede hacer viviendo en España.