Los bomberos batallan este lunes para contener un gran incendio forestal declarado ayer al nordeste de Atenas (Grecia), después de que fuertes vientos avivaran las llamas por la noche y resultaran dañadas decenas de casas en la localidad costera de Kalamos, a unos 40 kilómetros de la capital griega.

Más de 160 bomberos y 68 vehículos antiincendios, dos helicópteros y dos aviones se han unido al operativo contra las llamas, que empezaron en Kalamos y se extendieron a la localidad vecina de Varnavas. "Hay muchos frentes en activo, pero el principal está en Varnavas", ha declarado a Skai TV el viceprefecto de la región de Ática Oriental, Nikos Filippou.

Oficiales de los bomberos han informado a Reuters que hasta ahora no se han producido víctimas personales, pero al menos una decena de casas han resultado severamente dañadas. Las autoridades habían ordenado previamente la evacuación de dos campamentos infantiles que estaban en la zona de peligro. Cientos de residentes abandonaron el área de Kalamos en dirección a la playa para pasar la noche allí.

CAUSAS DESCONOCIDAS

La causa del fuego se desconoce, aunque en verano los incendios forestales suelen ser comunes en Grecia debido al calor y a los fuertes vientos. Más de 70 personas murieron en el 2007 durante los peores incendios en décadas.

En toda Grecia, con el de Kalamos, se han producido 54 incendios forestales en las últimas 24 horas, la mayoría de los cuales pudieron ser controlados en la etapa inicial.